Un partido que puede condicionar el futuro más inmediato. Aún con el subidón de haber asaltado a lo grande la cancha del Casademont Zaragoza hace apenas tres días, el Iberostar Tenerife regresa a la Basketball Champions League. Lo hace en el Santiago Martín y con un duelo que entraña unas connotaciones especiales que bien podría despejar, y mucho, el futuro más inmediato del cuadro lagunero. Reciben esta tarde los de Txus Vidorreta al ERA Nymburk checo, de inicio outsider a opositar por ser cuarto del grupo C, pero ahora el gran rival de los aurinegros por la primera plaza en esta fase regular.

Así, y con solo tres jornadas por delante, que el Iberostar Tenerife doblegue hoy al Nymburk tendría varios significados positivos para los canaristas. El primero, su clasificación matemática para octavos, al margen de dejar casi sentenciado su liderato, con el consiguiente premio de disponer del factor cancha en un hipotético tercer duelo de desempate. Una plaza de privilegio de la que los laguneros ya solo serían descabalgados con una carambola, ya que aventajarían a los checos en dos triunfos y tendrían a su favor el average tras haberles ganado ya en el duelo de la primera vuelta (68-78).

Además, encarrilar su actual primera plaza permitiría a los tinerfeños bajar el pistón, notablemente, en los tres compromisos de la fase regular que todavía le quedan por delante: visita al Gaziantep turco, choque contra el Riga en el Santiago Martín, y desplazamiento final a Alemania para medirse al Bamberg. Este tercer y último duelo sería el más relevante de todos, ya que apenas 72 horas después los canaristas deberán afrontar, de regreso a la Isla, la semifinal de la Copa Intercontinental, prevista para el viernes 7.

Pese a la condición de respondón en la que se ha parapetado el Nymburk, el Iberostar debe hacer valer su condición de favorito en el duelo de esta tarde; todo a poco que despliegue el juego de estas últimas semanas y que alcanzó su techo en la segunda parte del duelo contra el Zaragoza. Son argumentos de peso el estado de gracia de Huertas, la superioridad interior de Shermadini, la verticalidad de Yusta y el acierto exterior de Gielo. Precisamente la puntería del polaco desde el arco es otra de las claves que explican el salto de calidad reciente que han dado los laguneros.

Sólidos en el rebote

Se topará hoy el Iberostar con un adversario quizá no muy conocido en cuanto a nombres -pese a tener en sus filas a varios internacionales con la selección de su país, caso de Pavel Pumprla- pero sí muy bien armado y que tiene en el rebote una de sus principales armas, y a la vez uno de los puntos débiles de los tinerfeños en sus partidos más recientes. Así, los de Oren Amiel promedian 43,8 capturas por partido, por lo que el redoble de los interiores y también de los exteriores canaristas debe ser hoy máximo. Su gran exponente bajo los aros es el rookie Zach Hankins, que promedia 11,2 puntos y 7,6 capturas, si bien en el choque de la primera vuelta se quedó en un pobre 4+3. El reciente regreso del base Michael Dixon da más opciones a un rival contra el que están prohibidos los despistes en las filas aurinegras.