El Barcelona cerró el año 2019 creyendo en sus fortalezas, líder de la Liga y con buenas expectativas para la Liga de Campeones, pero acaba de entrar en una pesadilla en poco más de una semana del 2020, que le puede llevar a estar buscando nuevo delantero por la lesión de Luis Suárez y, peor aún, quizá también nuevo técnico, ante las dudas que existen sobre la continuidad de Ernesto Valverde.

Todo iba más o menos encarado hasta el derbi con el Espanyol con el que arrancó el 2020 futbolístico, en el que el equipo de Valverde se dejó remontar un 1-2 para acabar empatando el partido, y con el añadido de que Luis Suárez empezó a manifestar problemas en la rodilla derecha, la misma de la que fue intervenida en mayo y que le impidió jugar la final de la Copa del Rey.

Tras el tropiezo del primer partido del 2020, el Barcelona hizo las maletas para ir a Arabia Saudí a participar en el nuevo formato de la Supercopa, contra el Atlético de Madrid. El 3-2 del final del partido, tras dominarlo por 1-2, acabó siendo el detonante que llevó a la directiva a activar el plan B, es decir, prescindir de Valverde y contratar a Xavi Hernández, actual técnico del Al-Sadd.

El Barcelona, aunque disimuló un vuelo alternativo desde Arabia a Catar, argumentado que era para ver la evolución del Ousmane Dembélé, tras su enésima lesión muscular, en el viaje del ejecutivo Óscar Grau y del director de deportes azulgrana, Eric Abidal, en realidad estaba orientado a pedir una vez más a Xavi Hernández que dejase la aventura catarí y que tomase las riendas del Barça.

En estas últimas horas, el Barcelona ha estado esperando la respuesta de Xavi, quien al final ha aceptado el desafío, pero nunca a mediados de la presente temporada. De hecho, la carta de Xavi era la que tenía guardada uno de los aspirantes a la presidencia, como es Víctor Font, quien en el 2021 presentará su candidatura.

"Centrado" en el Al Sadd

Xavi ha aducido que ahora está "centrado" en el Al Sadd, con quien disputará la final de la Crown Prince Cup tras ganar este sábado al Al-Rayyan, y confirmó las conversaciones con Abidal.

"He hablado de muchas cosas con Abidal, es mi amigo", justificó Xavi tras rechazar el banquillo del Barça. "No puedo esconder que es mi sueño entrenar al Barcelona, lo he dicho en muchas entrevistas y todo el mundo lo sabe, pero estoy centrado en el Al Sadd", indicó el catalán en rueda de prensa.

El de Terrasa, que lleva al Barça "en el corazón", admitió las conversaciones recientes con Abidal. "Es mi amigo y le veo muchas veces. No tengo nada que decir sobre esto. Respeto al Barcelona, respeto a Valverde y respeto a mi club. Estoy centrado en dar lo mejor, ahora jugamos la final y estoy muy feliz. Me gusta entrenar aquí", añadió.

"Ellos han estado aquí conmigo y hemos hablado de muchas cosas, pero también estuvieron aquí para ver a Dembélé y es todo. Lo siento, pero no hay nada más. No puedo informar de nada más. Claro que vi a Abidal, es mi amigo, pero ya está. Respeto al club a mis jugadores", incidió Xavi Hernández.

Valverde, debilitado

Ante la negativa de Xavi a firmar un contrato con el Barcelona para sentarse de inmediato en el banquillo del Camp Nou, y esperar a la temporada 2020-21, el Barcelona se ha quedado sin su opción y con el 'problema' de cómo resolver ahora la situación de Valvderde.

Ante la junta directiva azulgrana, que se celebrará este lunes, todo apunta a que este domingo la comisión deportiva realice algún gesto, debido a que la exposición pública que ha tenido una vez más el Barcelona ente los medios estos días, transmitiendo los contactos con Xavi, ha dejado en una mala situación no sólo al club, sino al actual entrenador, quien si no recibe contraorden, este lunes se dirigirá a la Ciudad Deportiva.

Valverde, que fue renovado hace meses por el presidente, Josep Maria Bartomeu, cuenta con pocos aliados ya en el Barcelona, y después de la derrota en Arabia Saudí, y ante el temor de que el Barcelona pueda vivir otro descalabro en la 'Champions', como sucedió en las dos anteriores temporadas, el Barça parece dispuesto a hacer lo que hace años que no hace: destituir a su técnico a mitad de temporada.

Mientras esta situación se cuece ya en el Camp Nou, la posición de Valverde es de una debilidad manifiesta y pocos dudan de que ya no solo no dirigirá el partido del domingo contra el Granada, sino que ni entrenará este lunes.

Si bien Bartomeu ha salido públicamente a respaldar a Valverde en los sonados tropiezos deportivos, esta vez el presidente ha guardado silencio y ha movido piezas, como la de enviar a Grau y Abidal a seducir a un Xavi quien anoche no escondió su ilusión por dirigir al Barcelona, la misma que tiene para jugar el viernes la final de la Copa con su actual equipo, por lo que no desea dar el paso aún hacia el Camp Nou.