Como futbolista de primer nivel que fue, Baraja tuvo el privilegio de aprender de entrenadores de mucho prestigio, tanto en su etapa como internacional, siendo seleccionado por Camacho y Aragonés, como en los tres clubes en los que desarrolló su carrera: Real Valladolid, Atlético de Madrid y, sobre todo, Valencia, donde levantó dos Ligas, una Copa de la UEFA, una Supercopa de Europa y una Copa del Rey. Entre sus técnicos hay cinco que también dirigieron al Tenerife: Felipe Mesones, Pepe Moré, Vicente Cantatore, Antonio López y Rafael Benítez, seguramente el que más influyó en su actual cometido. Pero el vallisoletano también conoció de cerca los métodos de trabajo de Víctor Espárrago, Arrigo Sacchi, Antic, Héctor Cúper, Ranieri, Quique Sánchez Flores y, en sus últimas temporadas en activo, Emery. Maestros que fueron forjando un futuro que ya tenía claro, el de seguir sus pasos aplicando un estilo propio que ahora lleva al Tenerife.