El entrenador del Iberostar Tenerife, Txus Vidorreta, reconoció que "se esperaba" un Barça como el que arrolló a su equipo por 32 puntos a pesar de la derrota "poco real" que sufrió el viernes en la Euroliga ante el CSKA y que su equipo "no jugo mal durante 25 minutos" y no bajó los brazos. "Supimos volver muchas veces al partido tras situaciones incómodas", dijo. Lamentó el técnico del cuadro tinerfeño, sin embargo, "la desconexión" de sus jugadores en el último cuarto en el que solo sumaron ocho puntos por 28 del Barcelona. "Es la primera vez que nos pasa esta temporada y trataremos de aprender para jugar 40 minutos al mismo nivel", comentó. "Cometimos algunos errores en el tercer cuarto, cuando estábamos ocho o diez puntos abajo, lo que provocó que el Barcelona abriera una diferencia importante y ya no volviéramos al partido", afirmó un Vidorreta que destacó los pocos tiros libres que su equipo lanzó en la segunda parte como uno de los motivos que le impidió "mantener el nivel de intensidad" que impuso el Barcelona.

También incidió en lo "desafortunados" que estuvieron sus jugadores jugando cerca del aro. En ese sentido destacó el partido de Ante Tomic que ante el CSKA hizo menos 10 de valoración y que ante su equipo sumó 14 puntos y fue el máximo anotador del equipo azulgrana. Del juego del Iberostar destacó "el acierto desde la línea de tres puntos" pero encontró a faltar que en la segunda parte sus pupilos "estuvieron desafortunados jugando cerca del aro".

Por su parte, el entrenador del Barça, Svetislav Pesic, elogió al Iberostar Tenerife y destacó que habían derrotado "a un equipo muy sólido, con una excelente organización tanto en defensa como en ataque". El técnico serbio apuntó como clave del holgado triunfo de su equipo que "el Barcelona supo cómo jugarle al Canarias desde el primer minuto". Pesic felicitó a sus jugadores por "como jugaron contra Huertas y Shermadini", que no estuvieron a su nivel habitual. "Si no controlas a estos dos jugadores, tienes problemas", recalcó.

Mientras, el -33 con el que salió ayer el Iberostar del Palau significa la peor derrota del cuadro lagunero en más de tres años y medio. Para encontrar un borrón de los isleños tan significativo hay que remontarse hasta el 22 de mayo de 2016, precisamente contra el cuadro culé. En esa última jornada de la fase regular, los canaristas cayeron por -35: 93-58. El equipo azulgrana va camino de convertirse en el rival que más se ensaña con los aurinegros. El 102-60 de los cuartos de final de la Copa del Rey de Málaga 2014 es otro ejemplo de ello. Además, cuartos hasta la pasada en puntos recibidos con una media de 77,5 tantos, los 103 recibidos ayer suponen el peor registro de los tinerfeños desde el 25 de octubre de 2015, cuando cayeron por 112-89 en su visita al Real Madrid.