El partido por el que está investigado Aritz López Garai (Barakaldo, 6-11-1980) fue el penúltimo de su carrera como futbolista. El 4 de junio de 2017, teniendo como entrenador a Natxo González -ahora técnico del Tondela de Portugal-, fue titular y disputó los 90 minutos del señalado encuentro que disputó su exequipo, el Reus, ante el Real Valladolid en el campo del club tarraconense. Una semana más tarde, coincidiendo con la visita del conjunto reusense al estadio Juegos Mediterráneos de Almería, Aritz colgó las botas para, unas semanas más tarde, ser nombrado preparador del Reus con solo 35 años.

López Garai había decidido poner fin a su larga y variada trayectoria como futbolista al término de la campaña 2016/2017, a pesar de haberlo jugado casi todo en esa Liga -37 encuentros de un total de 42-.

Formado en la escuela de Lezama, Aritz no llegó a hacerse un sitio en la plantilla del Athletic. Pero no se alejó de su aspiración de ser jugador profesional. Tras subir un escalón compitiendo en el Barakaldo, equipo vinculado al Athletic, y salir cedido al Gernika (2001/02) para que adquiriera rodaje en Segunda B, el centrocampista vizcaíno dio el paso de continuar su carrera sin estar relacionado con su club de formación. El Conquense acogió en el verano de 2002 a un futbolista que acabaría participando en más de 525 partidos oficiales como profesional.

Tres campañas consecutivas en el equipo de Cuenca, en Segunda División B, convirtieron al López Garai en un jugador con cartel en esa categoría. De hecho, la desaparecida Unión Deportiva Salamanca se animó a ficharlo en la pretemporada de 2005. Fue en el Helmántico donde vivió su primer gran éxito como jugador: un ascenso a Segunda a las órdenes de Javi López.

Su carrera ya estaba en marcha en el ámbito profesional. Su siguiente parada fue otro club histórico, el CD Castellón, en el que militó dos campañas, la 2007/08 y la 08/09. Pepe Moré, Pepe Murcia, Abel Resino y Paco Hererra fueron sus entrenadores en esta etapa.

Rozando la treintena, López Garai continuó su trayectoria en otro equipo con la aspiración de subir a Primera en esos tiempos, el RC Celta. Bajo el mandato de Eusebio Sacristán y, de nuevo, Paco Herrera, Aritz volvió a ser fijo en casi todas las alineaciones, pero no pudo alcanzar el objetivo del ascenso.

A continuación lo intentó en el Córdoba, donde coincidió con un técnico que, por su estilo, marcó su futuro rumbo en los banquillos, Paco Jémez. Ese primer tramo de dos campañas en el equipo de El Arcángel tampoco le permitió festejar el salto a la máxima categoría, pero sí disfrutó de esa experiencia en su regreso al Córdoba, cedido por el Sporting tras pasar medio año en el club gijonés. De hecho, llegó a intervenir en seis encuentros de la Liga 2013/14, incluyendo el de la vuelta de la final de la promoción ante la UD Las Palmas disputado el 22 de junio de 2014 en el estadio de Gran Canaria, con el gol de Ulises Dávila que llevó al Córdoba a Primera.

Unos meses más tarde de ese éxito, Aritz se vio jugando en el Santiago Bernabéu, donde debutó en la principal categoría. Su recorrido fue de seis partidos en un ejercicio en el que la escuadra andaluza acabó bajando a Segunda.

Con 34 años aceptó retornar a Segunda B, seducido por un Reus que logró ascender en 2016. López Garai continuó una campaña más en el mismo equipo, ya en Segunda División A, antes de pasar a los banquillos sin cambiar de club.

Tras dejar al equipo tarraconense en la mitad de la clasificación de la Liga 2017/18, se comprometió con el Numancia (17ª en la temporada posterior), del que se desvinculó en junio de 2019 para poder firmar con el Tenerife, donde inició su proyecto más ilusionante sin la suerte que necesitaba.