El Tenerife de la temporada pasada tenía a estas alturas 16 puntos y se encontraba ya a ocho puntos del playoff y solo uno por encima del descenso a Segunda B. La trayectoria provocó la destitución de un entrenador (Joseba Etxeberria) y la salida del director deportivo Alfonso Serrano. La falta de gol y de contundencia defensiva fueron los pecados más repetidos en esas quince jornadas iniciales.

Hoy, un año después, el equipo blanquiazul tiene dos puntos menos y está más lejos de los seis primeros (a nueve) y más cerca del abismo (igualado a puntos con el Oviedo, que es decimonoveno). Además, acumula errores defensivos (hasta quince con valor gol) y sigue careciendo de la capacidad realizadora necesaria como para ser competitivo en la parcela ofensiva. Lleva cuatro goles más que en la 18/19, pero acumula 14 de las 17 dianas en solo cuatro jornadas (Numancia, Albacete, Lugo y Racing). Los otros tres en los restantes once partidos, quedándose en ocho de ellos sin ver portería (seis durante el curso pasado).

Disciplinariamente hablando tampoco sale bien parado el Tenerife en la comparación, puesto que las expulsiones empeoran esta cifra. En tarjetas amarillas solo lleva dos más (41-43), pero en rojas gana por goleada (1-6) en este Campeonato. La roja directa que el madrileño Aitor Sanz vio ante el Girona antes del descanso fue la última de una serie en la que destaca Robert Mazan con dos (contra el Fuenlabrada y el Huesca), Luis Milla (contra Las Palmas), Borja Lasso (Extremadura) y Carlos Ruiz (Zaragoza).

Muchas críticas se centraron la pasada campaña en la escasa capacidad anotadora de José Naranjo y Nano, las dos apuestas de Serrano para asegurar esta faceta, y de Malbasic. A estas alturas de la Liga, el andaluz había anotado tres tantos. Dos llevaba el serbio y uno solo el tinerfeño. Esos seis goles igualan los de la tripleta ofensiva de esta temporada, en la que Malbasic (4) lidera con mucha ventaja sobre Dani Gómez (1) y Ramón Miérez (1). La ansiada mejoría no ha llegado con los refuerzos de Moreno.

Peor se pone el asunto si se compara con la temporada 10/11, saldada con el triste descenso a Segunda B, puesto que el Tenerife repite secuencia y puntuación: tres victorias, cinco empates y siete derrotas para 14 puntos. Entonces llevaba un gol más que en la actualidad y su pareja ofensiva (Nino/Natalio) ya había logrado ocho dianas.

Como todas las comparaciones son odiosas, el conjunto insular tiene ante sí la oportunidad de mejorar esos registros en las próximas jornadas para huir de los fantasmas de la 10/11 y de la 18/19. Para ello, deberá pulir los dos pecados que se repiten y que condenan a los blanquiazules a estar alejados de los puestos que desea el presidente Miguel Concepción, los seis primeros, al menos como aspiración del presente curso.

Aritz López Garai, a diferencia de Gonzalo Arconada y Joseba Etxeberria, se mantiene en el cargo. La paciencia institucional ha resultado distinta, pero está a punto de verse colmada si el preparador vasco no logra cambiar la tendencia en casa este domingo ante el Cádiz. También ha ganado menos (1) que en la 10/11 (2) y la 18/19 (3).

Una lista sangrante de errores

  • Jornada 1: Alberto mide mal en un duelo aéreo y desencadena la acción del 1-0 en La Romareda ante el Zaragoza, después de muy buenos minutos de su equipo.
  • Jornada 2: Dominaba el Tenerife al Numancia con claridad cuando encajó dos tantos en errores de Nikola Sipcic, uno de ellos compartido con Adrián Ortolá.
  • Jornada 3: En un partido para olvidar, la Ponferradina golea 4-0 a los insulares. Sipcic abre la cadena de errores y repite más tarde, mientras que Alberto acaba cediendo en el cuarto en un duelo con Yuri.
  • Jornada 7: Alberto rompe el fuera de juego de Ibán Salvador con una mala decisión ante el Fuenlabrada.
  • Jornada 9: Algo parecido le sucede a Carlos Ruiz en una acción casi repetida ante el Oviedo y que vuelve a dejar de vacío en casa a los blanquiazules ante un rival teóricamente más débil.
  • Jornada 10: Cuatro días más tarde, de nuevo Carlos Ruiz tiene la mala suerte de participar en un gol rival después de tocar el balón con la mano en un penalti que ayuda al Extremadura a lograr el 1-2 definitivo.
  • Jornada 11: Contra el Rayo Vallecano, dos fallos a balón parado. El primero de ellos de Alberto, en el marcaje sobre el rematador. El segundo, de Ortolá en una salida inexplicable hacia ninguna parte.
  • Jornada 12: Alberto se entretuvo demasiado y perdió el balón ante el Racing, regalando el 1-1. Ortolá, en un mal despeje, facilitó el 3-2 y Mazan hizo la falta y dejó libre a su par para el 3-3 definitivo.
  • Jornada 15: Sipcic cometió penalti en una acción en la que el delantero de Girona tenía escasa salida y permitió así el 1-0 definitivo.