La Victoria de Acentejo sigue mimando a su niña bonita, su prueba por excelencia. El Castáñate Las Patas trasciende más allá de lo meramente deportivo. Es un evento especial y mantiene intacta su esencia, esa que la ha elevado a lo más alto del trail en Canarias, esa que ha fidelizado a 500 corredores año tras año.

El barrio de Los Arroyos fue uno de los centros neurálgicos de la prueba, albergando las salidas de las tres distancias: 23, 15 y 10 kilómetros. El otro punto clave se situó en el Parque El Pinar. Allí estuvo colocada la meta.

La distancia larga destiló la esencia del Castáñate. Sus recorridos, pasando por los viñedos característicos de La Victoria, castaños, pinar, el sendero de Peregrinación a Candelaria, el Barranco de María García, los ascensos exigentes y los descensos muy técnicos , volvieron a cautivar.

De entre todos ellos sobresalió la figura de Germán González, que se colocó en cabeza desde los primeros compases de la carrera y mantuvo su posición de privilegio hasta el final. Completó el recorrido en 2:25:36 horas y se proclamó campeón de la novena edición de la prueba. La medalla de plata se la adjudicó Augusto Miranda, con 2:32:26, mientras que Jorge Orihuela fue tercero con 2:33:51.

La categoría femenina fue dominada de principio a fin por Beatriz López, quien aventajó a su inmediata perseguidora en más de 10 minutos. Su tiempo final fue de 3:09:19 horas. La segunda plaza recayó sobre Kandela Yanes (3:20:24), mientras que Rocío Corzo fue tercera (3:28:07).

La distancia de 15 kilómetros también permitió disfrutar en gran parte de la belleza y la idiosincracia de la prueba victoriera. Fue dominada por Carlos Hernández en chicos y Jane Wickham en féminas.

La prueba contó en esta edición con una distancia ideal para los que se inician en el trail -10 kilómetros-. Alexánder González y Evelia García vencieron.