La fe mueve montañas, pero los jugadores y el cuerpo técnico del Tenerife necesitan algo más. Las victorias, ese combustible insustituible que todo lo cura, tienen que llegar para que no se marchite esa confianza en la idea de juego que ha mantenido hasta ahora en buen lugar a Aritz López Garai, pese a que la clasificación invite a otro tipo de juicios. El equipo se siente cómodo con esta filosofía de juego y, aunque culpa a los errores individuales de su escasez de puntos, deberá defenderla hoy precisamente ante uno de los pocos rivales que también fija su mirada en la portería contraria.

El Huesca, con una plantilla de lujo gracias a la inyección económica que reciben todos los recién descendidos, ha apostado por Michel y eso supone hacerlo por un fútbol combinativo. Todo un espejo para los blanquiazules, puesto que a los altoaragoneses ya les funciona la fórmula. Ubicado en puestos de playoff, el invitado que pasará esta tarde por el Heliodoro se basa en un centro del campo ordenado gracias a Mosquera, fortificado con Mikel Rico y con el gol desde segunda línea que aporta Juan Carlos Real.

El catálogo de jugadores ofensivos, con el japonés Okazaki a la cabeza, completa un equipo bien armado pero que debe mejorar fuera de casa. Como visitante solo lleva dos triunfos -los mismos que el Tenerife- y tiene entre ceja y ceja el Heliodoro como lugar para empezar a mejorar.

A los locales les llega esta dura visita en una situación preocupante debido a las bajas. Pocas, pero importantes. Pierde a Aitor Sanz, pero una cuestión familiar ha dejado a Alberto casi fuera de combate también. Será Undabarrena el que forme pareja con Luis Milla, una pareja habitual el pasado curso y en blanco durante esta campaña. Será la primera titularidad del vasco. La previsible ausencia de Álex Bermejo abre el abanico: Suso, Naranjo o un nueve que retrase la posición de Malbasic. Miérez partiría con ventaja.

Romper la mala racha

El Tenerife no canta victoria en casa desde el pasado 25 de agosto ante el CD Numancia (3-2), siendo cinco ya los rivales que han sacado algo del Heliodoro Rodríguez López de forma consecutiva. Acabar con esa sangría debe ser el primer paso de la escalada blanquiazul en la tabla clasificatoria.

Muñoz sí, Bermejo duda

De los jugadores que salieron tocados de la visita a Miranda de Ebro se incorporó rápido a los entrenamientos Borja Lasso y ha llegado a tiempo Álex Muñoz, ya recuperado de un pequeño esguince de tobillo. En cambio, sigue siendo duda Álex Bermejo. El jugador ya había forzado para estar en Anduva.

No le gana desde 1982

La última visita oscense al Heliodoro estuvo rodeada de polémica por una desafortunada actuación del colegiado Isidro Díaz de Mera. Ganó el equipo visitante (2-4). La última victoria blanquiazul ante el Huesca se produjo en la temporada 82/83 por 5-0, con goles de David, Berto, Diego, Joseíto y Lolín.

El retorno de Cristo

Juan Carlos Real ya jugó en el Estadio la pasada campaña y ganó, en las filas del Almería, por 1-3. Hoy volverá acompañado por Cristo González, que se cruzará por primera vez con el equipo en el que se formó y del que salió rumbo al Real Madrid. Ahora pertenece al Udinese, pero juega cedido en el Huesca.