Dani Gómez abandonaba Anduva el pasado sábado con cara de insatisfacción. Su entrenador, Aritz López Garai, había elegido a Miérez por delante de él para el primer cambio. Luego, después de 40 minutos calentando, no fue elegido para las otras dos sustituciones y volvió a quedarse en blanco. Como una semana antes contra el Racing, cuando ni siquiera entró en la lista de convocados. ¿Enfado? Pues como cualquier futbolista que no dispone de minutos.

Su llegada en calidad de cedido el pasado verano respondió a un esfuerzo considerable por parte de Víctor Moreno para adelantarse a otros equipos que también pretendían al canterano del Real Madrid. Sus cifras realizadoras de los últimos años le convertían en un delantero apetecible en el mercado de Segunda. El futbolista de Alcorcón eligió la Isla. Trece jornadas después solo ha sido titular en un encuentro: el desastre de Ponferrada. Desde entonces, sus apariciones (seis) se han iniciado desde el banquillo.

Sin protagonismo en el Tenerife, pero convocado por la selección sub-21, Dani Gómez aguarda oportunidades para demostrar su nivel. De momento, trabaja en silencio y acepta su situación sin alzar la voz. Una publicación suya en instagram fue tomada como el final de su paciencia. Nada más lejos de la realidad. La lucha por cambiar su rol de suplente en el equipo sigue adelante. Enero será otro cantar. Pero para entonces podría no haber debate si el madrileño ha tenido éxito en su propósito.

Undabarrena no descarta una salida en enero

Iker Undabarrena se sabe en una situación complicada. El peso de jugadores como Aitor Sanz y Milla o la confianza de López Garai en Alberto le han cerrado hasta ahora la puerta del once. Este sábado, ante el Huesca, podría llegar su turno. "No sé si es una pista o no que el míster haya hablado conmigo después del entrenamiento. Ha sido para ver qué tal estaba y cómo me encontraba de ánimo. Me ha dicho que esté tranquilo y dé el máximo posible", dijo en rueda de prensa.

Sería su primera vez como titular después de muchas jornadas casi en blanco. Tantas que ya entra en las quinielas para salir en el mes de enero. "Llevo bastante tiempo sin poder participar y entreno cada día para jugar desde el principio, pero siempre estaré preparado aunque sean para 5 minutos", aseguraba ayer el mediocentro vasco. La dura competencia ha sepultado de momento sus opciones. "Estando así Aitor Sanz es difícil entrar en el once", comentaba sin cerrar la puerta a una salida en enero: "Cuando llegue nos sentaremos a hablar y ver qué es lo mejor. Estoy abierto a cualquier cosa y si tengo que salir para tener minutos ellos (el club), me lo dirán".