La historia se repitió un año después y solo el sacrificio cambió el decorado. Atenery Hernández Martín (10/12/1994) vuelve a lesionarse de su rodilla en un Mundial, tal y como sucedió hace un año en la misma competición. No obstante, y pese a resentirse en el segundo intento de arrancada con los malditos 83 kilos -anteriormente, había podido con 80-, la de Aguere no solo completó el tercer intento sino que también lo hizo con los dos tiempos para acabar con un total olímpico de 178 kilos. La del Centro Regional se perderá las citas del 2019 e intentará estar repuesta para intentar la heroica de lograr plaza para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.

El destino, en ocasiones, es caprichoso, en otras se ceba con una misma persona. Quizá con Atenery Hernández se haya excedido. La lagunera saltó a la tarima de Pattaya (Tailandia) para resarcirse en un Campeonato del Mundo Absoluto de halterofilia. Copió la estrategia de 2018 y fue a por 80 y, luego, se atrevió con el peso con el que se lesionó, 83 kilos. En el segundo snatch se dolió y, en el tercero, el gesto fue clarificador.

"Fallé el segundo intento con 83 kilos. El peso no me daba respeto y fuimos al tercero con ganas y coraje para levantarlo. No obstante, no fue posible porque me hice daño en la rodilla derecha, cuando entré abajo me crujió y no pude levantarla. Me hice daño y todo cambió. Automáticamente pensé: no me puedo creer que haya vuelto a ocurrir. Ningún deportista se merece pasar por esto pero, ahora mismo, tengo que afrontar la realidad. Volveré", revela Atenery Hernández a EL DÍA.

La pupila de Víctor Galván había cuajado un Europeo y un Nacional muy bueno. Es más, se había probado en la Copa de las Espadas Azules, donde obtuvo buenas sensaciones. Las tenía todas con ella en el preludio mundialista. "Nunca se me pasó por la cabeza que podría tener la posibilidad de que ocurriera algo, habíamos preparado y trabajado muy bien con la psicóloga todos esos miedos. La preparación que llevábamos era, sin duda, para superar cualquier obstáculo o situación. Venía con ganas e ilusión. Me encontraba bien física y mentalmente; sólo quería disfrutar y volver a ser yo", lamenta la atleta.

Atenery Hernández intentará evitar el quirófano y, por ello, parará en lo que resta de 2019. "Es una decisión bastante difícil porque estamos a nada de Tokio 2020, que es por lo que hemos estado luchando todo este tiempo. Lo más inteligente es parar ahora. Miraremos estrategias para poder seguir luchando por el gran objetivo. Tengo 24 años, soy joven y tengo un largo camino deportivo por delante. Aún me queda mucho por demostrar", concluye una deportista que se prepara para agarrar, flexionar y quitarse de arriba la dolorosa carga.