La reciente advertencia del presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, de que se prohibirá fumar en el Santiago Bernabéu cuando concluyan las obras de remodelación en el recinto de la avenida de Concha Espina amplía el mapa de estadios sin humo en España. Cada vez son más los que se unen a medidas que ya tomaron hace unos años FC Barcelona o Valencia, que se extiende a todos los equipos del País Vasco y que también se ha puesto en marcha en Segunda División A.

El Heliodoro Rodríguez López no será una excepción, aunque no se espera que la cancha santacrucera entre en el grupo de instalaciones libres de humos a corto plazo, principalmente porque el Tenerife no contempla establecer esa norma de forma urgente. Además, la Ley Antitabaco del Gobierno de Canarias no especifica que no se pueda consumir tabaco en espectáculos públicos que se desarrollen al aire libre.

En la UD Las Palmas ocurre lo mismo. Hace 13 años, su presidente, Miguel Ángel Ramírez, dejó caer la posibilidad de que se creara una zona de no fumadores en el estadio de Gran Canaria, pero aún no se ha abierto ese sector especial.

Lo cierto es que el seguimiento al FC Barcelona, el club pionero, avanza a un ritmo lento. La entidad azulgrana dio el paso en 2012. Luego fueron todos los equipos vascos los que añadieron sus campos de fútbol a la lista de espacios con aire limpio, atendiendo a una ley aprobada por el Parlamento de la comunidad en 2016, de tal manera que la restricción beneficia a los espectadores que acuden a San Mamés, Anoeta, Ipurúa y Mendizorroza, por citar los recintos incluidos en el circuito de LaLiga, en los que incluso se llega a multar el uso de cigarros electrónicos.

El camino ya estaba abierto y más clubes fueron siguiendo la iniciativa. El Girona, estando en Primera División, fue uno de ellos, con la particularidad de permitir a los fumadores utilizar una zona específica de Montilivi e incluso salir del estadio, garantizando el retorno a la grada con la entrega de un ticket.

Entretanto, el moderno Wanda Metropolitano, la nueva casa del Atlético de Madrid desde la campaña 2017/2018, tiene reservadas 19.000 plazas para una grada familiar, exenta de humos. El Espanyol estrenó en la presente temporada un sector similar en su estadio y recomienda no consumir tabaco en el resto de zonas, como prueba piloto que da continuidad a la prohibición de fumar en la Ciudad Deportiva Dani Jarque. Precisamente, el cuidado de la salud de los más pequeños también ha sido tenido en cuenta por el Deportivo, concretamente en el uso de la escuela de Abegondo. Siguiendo en Galicia, la afición del Celta votó el pasado verano "no al tabaco" en Balaídos en una encuesta planteada por el alcalde de Vigo, Abel Caballero, y recogida en la web del Concello de la ciudad pontevedresa.

Hay más casos. La prohibición está de estreno este curso en el Real Valladolid, cuyo estadio, el José Zorrilla, ofrece información con nuevos carteles que muestran una campaña de sensibilización dirigida a los espectadores. Antes, en junio de 2016, el Málaga ya la había implantado. Lo hizo con un inesperado mensaje en la cuenta de Twitter del dueño del club, el jeque Abdullah Al-Thani: "Está prohibido fumar en el interior del estadio y todas las instalaciones del club. Gracias por vuestra comprensión".

En el ámbito internacional está más que asumido que no se permite el consumo del tabaco. Ya no molesta el humo en las competiciones organizadas por la FIFA, como los Mundiales de Sudáfrica 2010 y Brasil 2014, de manera experimental, y Rusia 2018, de forma definitiva; y por la UEFA, en la Eurocopa y en las últimas finales de la Champions y la Liga Europa. Lo mismo pasa en uno de los torneos más prestigiosos, la Premier League, donde la norma es estricta desde 2007.