A pocas fechas para que dé comienzo la temporada en cada una de las categorías de fútbol base, el Juventud Laguna sigue padeciendo las vicisitudes que ocasiona tener que ceñirse en sus entrenamientos a mitad de campo del Anexo Francisco Peraza. La entidad de Aguere ya ha mostrado su malestar por ver cómo, aun teniendo más licencias -más de 50- que otros clubes usuarios de la instalación ubicada en la zona de La Manzanilla, tiene el mismo espacio que el resto, cosa que imposibilita la práctica deportiva con unos mínimos que sus profesionales entienden como mínimos. "Apelo siempre al entendimiento entre las partes. Tenemos que tender la mano para que todos los clubes tengan su horario y espacio de entrenamiento. Las instalaciones son las que son", reconoce Idaira Afonso, presidenta del OAD de La Laguna.