Un paso más hacia la igualdad. El Club Voleibol Haris sigue perfeccionando su estructura conforme avanzan los años. Desde su eclosión en el año 2011, eran conscientes de que nacían con una hoja de ruta que desembocaba en la codiciada Superliga, no obstante, el cómo era importante en pos de mantener una esencia que fuera acorde a los valores que representa su nombre. Para la venidera campaña, serán dos féminas las que lideren los principales buques insignias blanquiazules. Flavia Dias mantendrá un doble contacto con Patri Suárez; más allá de su relación entrenadora-jugadora, establecerán una sinergia como técnicas. La gallega se ha convertido en la nueva entrenadora del equipo juvenil y filial.

"Siento gratitud por la oportunidad que me ha brindado el Club. Siento mariposas en el estómago, tengo ganas de empezar ya. Siempre le digo a las niñas (por las canteranas) que siempre hay que estar preparado porque no se sabe cuando llega tu oportunidad; la mía ya está aquí, mucho antes de lo que esperaba", declara Flavia a EL DÍA.

"Al principio me asusté un poco pero ya lo he asimilado y estoy muy contenta de que el Club me haya dado la oportunidad de llevar el equipo juvenil y sénior. Es un reto bastante importante, pero estoy tranquila porque trabajaré con Flavia e Isra (Martín), que me ayudarán bastante. Como maestra que soy, me gusta enseñar y estaré encantada de hacerlo como entrenadora de este equipo", asevera la oriunda de Sada.

La apuesta de la entidad de Aguere intenta romper con "la falta de mujeres en los cargos de responsabilidad, puntualiza Flavia. "Siempre hay muchos chicos y pocas chicas. Eso no quiere decir que no haya féminas, sino que no tienen las mismas oportunidades. El cambio empieza por uno mismo", relata la americana.

Por su parte, Patri Suárez asegura que tanto ella como Flavia "tirarán para adelante como sea. Poco a poco las mujeres estamos llegando. Si es verdad que nos cuesta estar al frente de equipos profesionales pero, cuando nos dan la oportunidad de meter la puntita del pie, vamos a intentar arrastrarlo para ponerlo entero".

Flavia Dias arribó a Tenerife en días pasados para afrontar una temporada "muy ilusionante", asegura. La brasileña, después de poner el cierre a su etapa como central, se enfrenta a un reto. "Fue gracioso, al llegar a Tenerife y bajarme del avión me recorrió la sensación de empezar a vivir algo muy grande. Desde muy pequeña he aprendido que soñar no cuesta nada y, desde que llegué a juvenil, me interesé por las tácticas. Desde entonces, cada jugador ha dejado una semilla en mí", comenta.

"David (Martín) me ha dejado un listón muy alto. Cuando uno habla del Haris, se está hablando de un referente; dirigir a este equipo es una responsabilidad enorme. Cohesionar bien al equipo es la clave para mantenernos arriba", revela Flavia.

A Patricia Suárez, como para el resto de jugadoras que permanecen en la escuadra lagunera con respecto al pasado curso, les tocará acostumbrarse este curso a la Flavia entrenadora en detrimento a la jugadora-compañera. "Siempre nos ha ayudado en la cancha desempeñando el rol de líder. Ahora le toca ayudarnos al cien por cien en la consecución de retos", empieza argumentando al respecto la opuesta.

La jugadora internacional cree que en esta nueva relación se van a "llevar bien. Además, Flavia nos va a entender en todo momento a las chicas; ella ha vivido el ser jugadora, estar cansada, pegarte palizas de viaje, etcétera. David (Martín) lo podía llegar a entender, pero no lo sentía en su cuerpo. Flavia en eso, como en muchas otras cosas, nos va a ayudar", argumenta Suárez.

El cambio de rol al que se enfrenta Flavia y la plantilla con el nombramiento de la brasileña como técnica, debe traer consigo una asimilación de las partes. "Creo que lo sabremos llevar como profesionales que somos. Eso no quiere decir que cuando salgamos del Pablos Abril seamos amigas y nos comportemos como tal", apostilla Patri Suárez.

La gallega es una de las pocas jugadoras que continúan en el remozado roster del Haris. Flavia refrenda sentirse "satisfecha" del equipo que se ha conformado. Cada una de las jugadoras responde a la "idea" que tiene el cuerpo técnico. "Quizá tengo hasta demasiado. Lo único que necesitaba era tener las piezas claves que aseguraran cambiar de ciclo; tener las mismas jugadoras siempre, puede hacer que entres en la zona de confort. Cuando llegas a un equipo, la motivación es diferente y debes de demostrar por qué han confiado en ti. Como decía Pep Guardiola, los ciclos acaban, tanto para entrenadores como para jugadores", explica Dias.

En lo que respecta a objetivos para la venidera temporada, Flavia asegura que, mirando la plantilla, no puede aspirar a poco y, "manteniendo los pies en el suelo", quiere mirar hacia "arriba. La gente te pide que estés en lo más alto. Nosotras queremos luchar por todo", dice. Mientras, Patri Suárez, respetando la palabra de la técnica, añade que las miras pasan por "ir semana a semana. Solo tengo en la cabeza el día 2 de septiembre, que es el día en el que empezamos".

En las metas de uno y otro equipo, Flavia y Patri se conjuran para que todo salga lo mejor posible. "Creo que va a ser un gran año. Trabajaremos piel con piel y espero que las cosas salgan bien", refrenda la nueva entrenadora del júnior.

En las líneas de actuación que llevarán a cabo, y en sintonía con una de las aspiraciones del presidente David Martín, se encuentra la de lograr que canteranas lleguen y se asienten en el primer equipo. Suárez adelanta que ya, desde esta temporada, jugadoras del filial y sénior, "entrenarán algún día con el equipo de Superliga. Todas trabajan con las miras puestas en tener un huequito en el primer equipo. No obstante, está difícil por el nivel tan grande que hay en plantilla", reconoce.

Por su parte, Flavia acude a los "títulos" que lograron los equipos de base en la temporada pasada para respaldar el "gran trabajo" de cantera que se está desempeñando en el Pablos Abril. "Queremos premiar a la cantera con oportunidades. Valoraremos el trabajo y constancia de cada jugadora para brindarle la oportunidad que merece y que, paralelamente, le dará la motivación suficiente para seguir progresando", concluye la entrenadora de Superliga.

El Haris recoge el testigo del Arona Tenerife Sur

Hace dos campañas (2017/18) el Arona Tenerife Sur marcó la pauta y rompió con su estructura numerosos techos de cristal. Las Romina Lamas, Arkia el Ammari y Nykiel Elzbieta marcaron un antes y un después en el deporte nacional, al liderar al Arona Tenerife Sur al subcampeonato de Copa de la Reina y llegar hasta las semifinales por el título liguero. No obstante, la apuesta fue flor de un año y, ante la falta de ayudas y subvenciones, se acabó extinguiendo.

La puesta en escena y rendimiento que ofreció la entidad con un cuerpo técnico íntegramente femenino fue inmejorable. No obstante, la sociedad y empresas no respaldaron una apuesta del presidente Jaime Fernández Barros.

La nueva entrenadora del Haris, Flavia Dias, rememora la gesta y subraya que fue "una pena" la pérdida de la mujer al frente de proyectos deportivos en la isla de Tenerife. "El Arona nos ha enseñado dejando la huella".

"Queremos ser muestra de que se puede. Ahora mismo somos dos mujeres al frente del Haris pero, con el paso del tiempo, aspiramos a ser más. Todo dependerá de si mantenemos un soporte detrás que nos avale y nos ayude a continuar", reseña Dias.

Por último, tal y como hizo el cuerpo técnico de aquel Arona, a Flavia y a Patri les toca "demostrar" que son capaces de "liderar y conseguir objetivos", concluye la técnica que coge el testigo de Lamas.