El Tenerife se está tomando con paciencia la búsqueda de los dos fichajes que le quedan. El mercado sigue sin ofrecer opciones convincentes para que el club blanquiazul cubra los puestos de extremo en las dos bandas, pero en las oficinas del Rodríguez López no van a conformarse con cualquier alternativa. Saben que la ventana de verano, que estará operativa hasta el 2 de septiembre, se irá agitando con el paso de los días y que se creará un efecto dominó del que podría salir beneficiada la plantilla tinerfeña.

Víctor Moreno, director deportivo del Tenerife, reconoció ayer, tras la presentación de Ramón Miérez, que está siendo "bastante paciente" para esperar los resultados de un "efecto dominó" que dejará sin equipo a jugadores de Primera. "Tampoco queremos vincularnos ya a una operación de fichaje, porque estamos viendo que, probablemente, en los próximos días se agitará el mercado, así que estamos siendo pacientes para acertar con el perfil", confirmó después haber comprobado que se "está abriendo más el abanico de alternativas".

Pese a esta actualización de las oportunidades, el mercado no está siendo "generoso" con un Tenerife que ha tratado de reforzarse con un tipo de futbolista muy concreto que encaje en el modelo de juego de López Garai y que tenga la ambición de relanzar su carrera o, siendo joven, quiera crecer. Ese seguirá siendo el prototipo de fichaje ideal, pero las circunstancias podrían introducir algún matiz. "El mercado no está siendo generoso en cuanto a estos perfiles", así que la juventud no será un requisito "principal", señaló el dirigente antes de advertir de que "uno de los dos movimientos" pendientes podría llevar a la plantilla del Tenerife a un futbolista con "un poquito más de experiencia en la categoría".

Por otra parte, el director deportivo aclaró que el "período de negociación" relacionado con posibles salidas de jugadores que sí cuentan para el nuevo proyecto "ya ha finalizado". En la semana del inicio de la competición y con "el grueso de la plantilla" preparado para el debut, Moreno no contempla la posibilidad de que se reduzca el potencial del equipo. Por tanto, salvo sorpresa, quedan descartadas las salidas de futbolistas que sonaron para otros clubes durante el verano, como Luis Milla o Alberto Jiménez, cuyos contratos podrían ser revisados más adelante. La manera de afrontar esas negociaciones, por parte del Tenerife, dependerá del "escenario económico" en el que se encuentre después del mercado. "Queremos completar la ventana de fichajes para ver en qué situación quedamos en cuanto al límite salarial y, a partir de ahí, afrontar algunas renovaciones", avanzó. La de Alberto, cuya vinculación terminará en junio de 2020, tenía posturas alejadas, según contó el dirigente en otra rueda de prensa.

El Tenerife deja de ser un "equipo incógnita"

A Moreno le "genera grandes garantías" la manera en la que el Tenerife llega a la Liga por su modelo de juego. "El equipo tiene muy claro cómo quiere ganar los partidos, y lógicamente también sabemos cómo los podemos perder", expuso sobre un "avance" que diferencia la temporada pasada con la que comenzará pasado mañana. "Creo que no somos un equipo incógnita, y eso es algo a lo que le doy muchísimo valor", destacó el director deportivo del club. "Tenemos más o menos claro el guion del partido de Zaragoza", añadió sobre el encuentro de la jornada inaugural, en el que los blanquiazules se presentarán "más que preparados" para competir. La visita a La Romareda servirá, además, para comprobar la respuesta del Tenerife ante una de sus eternas asignaturas pendientes: la de los partidos en campo contrario. La versión visitante del equipo ha sido objeto de un profundo análisis por parte de Moreno, quien, para empezar, se ha planteado "cambiar cosas respecto al plan de viaje". De resto, hay factores que todavía no llega a dominar. "Es algo que nos preocupa, porque no podemos reducir nuestra suma de puntos a los partidos en casa. Si no, estaremos abocados otra vez a pasar una mala temporada".

Ambición y coherencia

Moreno prefirió no establecer objetivos a largo plazo. "Sería un error", opinó tratando de liberar a la plantilla del peso de una "mochila innecesaria" que ni siquiera quieren cargar los clubes con los presupuestos más altos de la categoría. "Este es un grupo que se acaba de confeccionar y que jugará con un modelo nuevo, así que sería un error poner objetivos a largo plazo", insistió. Para no invitar al equipo a ser conformista, advirtió de que "la exigencia será máxima" en cada partido para que el Tenerife "juegue bien, compita bien y sea capaz de ganar". En ese contexto, Víctor Moreno marcó la pauta de "trabajar desde la exigencia y con toda la ambición, pero con la tranquilidad y la coherencia que exige la competición".

El reto ante la afición

La cifra de 7.000 abonados que rebasó esta semana el Tenerife dio pie a otra reflexión de Víctor Moreno, quien no entró a valorar si se trata de un volumen de ventas adecuado o escaso, pero sí opinó que el escepticismo de muchos aficionados es comprensible. "La gente está expectante y creo que es el equipo el que tiene que atraer al aficionado", señaló el dirigente, seguro de que el entrenador y los futbolistas serán capaces de convencer al público. Sin marcar plazos inflexibles, sí apuntó que las primeras cuatro jornadas de Liga, en las que se incluirá el atractivo debut en La Romareda y el derbi en el Heliodoro, servirán para que el nuevo Tenerife muestre una "cara competitiva diferente" y termine de atraer a los seguidores más cautos. "No me voy a pronunciar en cuanto a si me parecen muchos o pocos abonos vendidos, porque el Tenerife viene de unas temporadas difíciles y el aficionado puede mostrarse un poco escéptico, pero creo que el equipo conseguirá atraer su atención".

Más criterio que nombres

Moreno puso de relieve el "nivel" creciente que van alcanzando los clubes de Segunda en la confección de sus plantillas. "Las direcciones deportivas están mucho más preparadas y tienen las ideas más claras, y hay cinco o siete clubes que lo están haciendo francamente bien en el mercado; y no por los nombres, sino por el criterio".