Aritz López Garai se mostró muy sincero en la sala de prensa del Heliodoro Rodríguez López al término del último ensayo de la pretemporada, el de anoche ante el Real Madrid Castilla. El entrenador del Tenerife reconoció que se sentía "muy preocupado" por la endeblez defensiva que detectó en su equipo, defecto del que ya había hablado en otros amistosos.

"Me voy preocupado porque no podemos encajar estos goles", dijo refiriéndose a los tantos que logró el filial blanco sin tener que generar demasiadas ocasiones. "Es impensable que encajemos goles con tanta facilidad. Es una cosa que ya veníamos arrastrando y que corregimos un poco en el partido con el Celta, pero ha vuelto a aparecer. Somos demasiado endebles en algunas situaciones y no podemos sostenernos así, es imposible. No puede ser que estemos con un 3-1 a favor, tengamos que defender por detrás del balón 6 minutos y no sepamos hacerlo. Nos metieron el segundo gol, casi nos empatan, terminamos pidiendo la hora... No hay por dónde agarrarlo ni por dónde sostenerlo. Estoy muy preocupado", insistió Aritz.

En el análisis del encuentro de ayer, apuntó que vio cosas que sí le convencieron, como el funcionamiento ofensivo. "Atacamos bastante bien y generamos muchísimas ocasiones, y eso no es algo que me pille de nuevo", señaló para volver a su línea autocrítica. "Pensaba que habíamos dado un paso adelante en el tema defensivo y sí que apretamos muy bien y fuimos muy intensos, pero cuando tenemos que defender por detrás del balón nos cuesta un mundo, y mi responsabilidad es mejorarlo. Vamos a meterle horas y horas, porque es lo que me trae de cabeza", declaró.

Al ser consultado por las causas de la irregular respuesta defensiva de sus jugadores, opinó que influyen diversos factores. "Es un poco de todo: cuando aprietas siempre tan arriba y de forma tan agresiva, te desgastas mucho, pero cuando el rival también juega, tiene el balón y empieza a someterte, tienes que saber sostenerte, defender, bascular y correr, y eso requiere concentración, piernas, ganas, actitud defensiva...", explicó el técnico.

"Estas cosas van con el carácter del futbolista y con saber que te estás jugando el partido; y tenemos que metérnoslo en vena, porque si no, vamos a estar sufriendo por los campos", advirtió. "Fuera de casa, sobre todo, habrá equipos que, por su forma de jugar o su condición de locales, nos van a obligar a defender más tiempo del que querremos por detrás del balón, y como no sepamos sostenernos, vamos a tener un problema. En ese sentido, hay que ser claros y trabajar desde ya, porque la primera salida será a Zaragoza, y si pensamos que no nos van a atacar nunca, estaremos muy confundidos. Hay que defender, y cuando tengamos que presionar arriba, lo haremos. Pero cuando el Zaragoza salga de la presión y nos someta, tendremos que mantenernos de pie detrás del balón, y en ese trabajo, aparte de concentración, hace falta actitud, piernas, querer, apretar, saber defender una acción, saber tapar un centro, marcar en el área...".

López Garai se puso en el lugar de los aficionados, que aplaudieron al Tenerife en varias fases del partido. "A la gente le gusta porque ve que el equipo ataca y le gusta ver goles. Estoy muy agradecido por esa predisposición. Desde mi llegada he notado cariño hacia mi persona y hacia el equipo. Parece que gusta lo que intentamos proponer y en este partido tuvimos momentos buenos, pero, como entrenador, tengo que quedarme con lo que me preocupa", finalizó.