Doscientas horas de convivencia, nueve entrenamientos, tres partidos de preparación, casi ningún contratiempo, la incorporación de un fichaje... Así se podría resumir la concentración de pretemporada que realizó el Tenerife en Portugal desde el 30 de julio hasta ayer, fecha del regreso a una semana y media del inicio de la competición.

El hotel Monte Prado y el Centro de Estágios de Melgaço fueron, durante ocho días, el núcleo de la puesta a punto de los blanquiazules, que combinaron sesiones diarias -cuatro veces en doble turno y un respiro el domingo para disfrutar de una experiencia de rafting en el río Miño- con tres ensayos. El primero midió al Tenerife con dos adversarios en Pasarón a modo de triangular. El 0-0 con el Pontevedra, de Segunda División B, y la derrota por 1-2 (gol de Malbasic) ante el Deportivo dejaron conclusiones para todos los gustos. Lo mejor fue el tramo largo de superioridad ante los coruñeses, pese a la derrota. Luego, el sábado por la mañana llegó el áspero encuentro con el Sporting de Braga B. "Al final, has perdido, te han pegado, la segunda parte no sirvió para nada y la gente salió enfadada", dijo el técnico Aritz López Garai tras el 4-2 (goles de Bermejo y Malbasic) en contra en un amistoso demasiado tenso.

Pero el Tenerife pudo marcharse de Portugal con mejores sensaciones gracias al convincente triunfo por 1-0 ante el Celta (Malbasic) en el estadio de Melgaço.

"La experiencia ha sido muy positiva", admitió el entrenador, que logró contar con todos sus jugadores en cada entrenamiento y en cada partido, con los matices de las bajas de Aitor Sanz, en la visita al Sporting de Braga B, y del canterano Josué, en ese mismo test y en el posterior con el Celta. De resto, poco trabajo para el médico debutante Dámaso Moreno.

La estancia en Portugal también dio para que creciera el grupo en un componente, ya que el fichaje del serbio Nikola Sipcic se cerró con tiempo suficiente para que viajara a Melgaço e incluso tuviera minutos en el último amistoso.

En la otra cara de la moneda estuvo en Mauro dos Santos. Durante la concentración, justo tras el triangular en Pontevedra, se confirmó que el club no cuenta con el central argentino, que se ejercitó con el grupo pero no intervino en los encuentros de preparación, lo mismo que Galván, cuya salida a préstamo continúa pendiente.

En definitiva, López Garai aseguró que estos casi nueve días "sirvieron para mucho, no solo por los tres partidos disputados, sino también para formar grupo". El míster se mostró "encantado" con el "buen ambiente" que percibió entre sus jugadores. "Quiero que la gente trabaje muy fuerte, pero que también tenga momentos más familiares", añadió Aritz antes de compartir algo de sus charlas a la plantilla. "Le he dicho a los jugadores que pasamos muchísimas horas juntos, y todo lo que sea decirnos las cosas a la cara, reír, llorar y trabajar juntos, nos va a hacer más fuertes, y Melgaço nos ha servido para eso. Nos han tratado fenomenal y ha sido una experiencia muy positiva apara el Tenerife". La pretemporada sigue.