Por nombre y trayectoria, la de Marcelinho Huertas seguramente sea la incorporación más rimbombante del renovado Iberostar Tenerife para el ejercicio 19/20. El veterano base brasileño admite, pese a sus 36 años, tener todavía "buen basket para unas cuantas temporadas más" y además acepta el reto de convertirse en el líder espiritual de la plantilla aurinegra. "Me gusta ser la voz del entrenador en la pista", admite el ex del Baskonia. Desde Anápolis, en la concentración de la selección canarinha que participará en la Copa del Mundo, el de Sao Paulo habla en clave canarista -y ambiciosa- sobre lo que espera que sean sus dos próximos cursos deportivos, los que ha firmado con el conjunto lagunero.

¿Por qué decidió fichar por el Iberostar Tenerife?

Bueno, porque creo que se trata de un muy buen proyecto para el que se han contratado grandes jugadores. Además, tengo muy buena relación con el entrenador y ellos han depositado mucha confianza en mí. Espero poder estar a la altura del proyecto y ayudar al club a realizar una gran temporada.

En un principio, en su despedida del Baskonia, usted declaró que quería seguir jugando Euroliga, pero al final no ha sido así. De hecho será la primera vez en mucho tiempo que no milite en un club de primerísimo nivel...

Al final la carrera de un deportista consta de diferentes ciclos y tú tienes que elegir lo que crees que es más correcto para ti en cada instante. Y este momento fichar por el Iberostar Tenerife considero que es lo más correcto. Es cierto que tuve la oferta de otro club que me daba la oportunidad de jugar Euroliga, pero era solo un año de contrato. Además ahora tengo otras prioridades, y con una familia con dos bebés [fue padre hace cuatro meses] al final importan otras cosas, como la estabilidad. Y en vez de jugar Euroliga preferí ir a un sitio donde pudiera estar bien con los míos y disfrutando de esa estabilidad.

Ha firmado por dos temporadas. Con 36 años ¿se siente todavía con cuerda para rato?

Todavía me siento muy fresco y pienso que me quedan unos cuantos años más de buen basket. Espero que pueda estar sano, porque eso es lo más importante, el no tener ningún tipo de lesión y seguir así jugando a un alto nivel.

¿Qué se puede esperar de usted? ¿Se puede pensar en Marcelinho Huertas como el líder del Iberostar?

Espero aportar muchas cosas al equipo. Está claro que una de ellas será la experiencia y también varios aspectos más que ya he aportado en mis otros equipos y que en parte me han hecho llegar hasta aquí. Trataré de imponer mi estilo, hacer que todo el equipo esté involucrado en el juego y tratar de ser un líder y la voz del entrenador dentro del campo.

El día de su confirmación como nuevo jugador canarista dijo que vendrá para pelear por más cosas de las que la afición se imagina. ¿Puede ser el Iberostar competencia para rivales como Unicaja o Valencia? ¿Se está en capacidad de soñar con títulos?

Suelo ser muy ambicioso y creer en el potencial de los equipos en los que estoy; tratando de ver las cosas buenas y confiar en ellas. Siempre voy a decir que el equipo puede pelear por algo importante y más aún viendo la plantilla que hemos hecho. Pienso que debemos estar ilusionados y realmente creer. Y si ahora mismo la gente se ve con poca ambición, espero que nosotros hagamos que las aumenten poco a poco. Hemos configurado un muy buen equipo y ahora hay que encontrar la química idónea para que dentro del campo podamos responder a las expectativas que se esperan de nosotros.

¿No es arriesgado que en el equipo toda la plantilla sea absolutamente nueva?

Está claro que tener una plantilla totalmente nueva provoca que a veces el encontrar esa química que comentaba lleve un tiempo extra. Pero con jugadores de tanta calidad y también experiencia se puede lograr que ese tiempo sea más pequeño y que encontremos nuestra mejor versión cuanto antes. Seguro que con Txus al mando se empujará todo lo posible para encontrar pronto esa química, y a partir de ella podremos pelear como esperamos.

¿Es Shermadini el compañero ideal para que Huertas explote al máximo su juego en el pick and roll?

Shermadini es un jugador muy dominante dentro y habrá que aprovecharle en todas las facetas del juego. Está claro que para mi juego es importante tener a alguien que tenga en el pick and roll una de sus características más fuertes, pero con él no solo dependeremos de eso, ya que en el poste bajo y cerca del aro también es muy determinante y fiable. El equipo tiene muchas más armas y seguro que con Sherma y con otros compañeros más encuentro esa buena compañía.

Vuelve a encontrarse con Txus Vidorreta 12 años después. ¿Qué recuerda de su año en Bilbao?

Mi año en Bilbao con Txus fue una temporada prácticamente perfecta. Creo que hicimos la mejor campaña del club hasta ese momento. Teníamos un presupuesto muy bajo comparado con el resto de equipos importantes, pero eso no nos impidió hacer un año memorable, ganando al Barça en Supercopa y eliminándoles en la Copa del Rey, y durante el año creo que también derrotamos a todos los demás clubes salvo al Real Madrid, terminamos líderes la primera vuelta... Fue un año brillante, con una química espectacular, y con un gran ambiente que se vivía a diario en los entrenamientos y también en los partidos de La Casilla. Lo llevo guardado con mucho cariño.

¿Ha influido él en su fichaje por el Iberostar?

Sin duda que el hecho de que Txus sea el entrenador ha tenido mucho que ver en mi fichaje por el Iberostar Tenerife.