El sexto día de la pretemporada del Tenerife incluyó un único entrenamiento. La práctica tuvo lugar en las instalaciones de El Mundialito y se desarrolló con la participación de Filip Malbasic, que se había perdido algunas sesiones por unas molestias en la rodilla izquierda.

En cambio, no asistió el canterano Josué, mientras que Nahuel, otro jugador del filial que está trabajando con el primer equipo, continuó con la recuperación de la rotura con arrancamiento del adductor que sufrió en la parte final de la temporada pasada. El lateral izquierdo no ha podido ejercitarse a la par que sus compañeros.

El entrenamiento consistió en diferentes juegos con balón en los que Aritz López Garai puso en práctica la velocidad y la precisión de sus futbolistas en la búsqueda de pases y la presión. A continuación, los blanquiazules disputaron un partidillo a lo ancho del campo en el que se enfrentaron dos equipos de diez futbolistas cada uno, con la ayuda de Filip Malbasic, que ejerció de comodín para el conjunto que tenía la posesión de la pelota.

La rutina de la puesta a punto para la Liga cambiará esta mañana, ya que el equipo se acercará al monte de Las Raíces para realizar una actividad diferente. Ya en horario de tarde, la plantilla regresará a su lugar habitual, las instalaciones de El Mundialito. Ese será el escenario de los cinco entrenamientos restantes de una semana -el viernes habrá doble turno- que finalizará con un partido amistoso ante el Águilas en el T3 de Adeje.