La perseverancia lleva al éxito. Esa frase se la ha grabado a fuego Marta Huerta de Aza (Palencia, 31/03/1990) para alcanzar cada uno de sus objetivos; el último, ascender a Segunda División B. El Comité Técnico de Árbitros de la Real Federación Española de Fútbol dio a conocer ayer el listado de colegiados y asistentes en cada una de las categorías -Primera, Segunda, Segunda B y Primera Femenina-, donde la afincada en Tenerife accedía a la de bronce.

La palentina adscrita al Comité Tinerfeño revelaba hace algo más de un mes a este medio que el "primer objetivo" era llegar a la Segunda B. Ya es una realidad. "De pensarlo y desearlo tanto pensé que nunca llegaría pero, mira, todo llega y estoy que no me lo creo todavía", reconoce a El Día desde Italia.

El hito del ascenso de Huerta de Aza, colateralmente, supone la ruptura de un techo de cristal que tiene un único precedente, hace algunos años -de 1998 a 2003-, en una árbitra balear -Carolina Doménech Ceballos-. "En esta nueva etapa costaba que alguien llegara. Ahora, hay que pasar las pruebas, que llegue la primera designación y mantenerlo; estas cosas hay que cuidarlas para que dure muchas temporadas", asevera Marta, que no quiere fijar un reto mayor que la permanencia.

La trayectoria de la distinguida colegiada, que también dirigirá partidos de féminas UEFA, después de estancarse a las puertas de la Tercera -estuvo cuatro campañas intentando ascender-, se ha lanzado definitivamente. Marta Huerta no cree que la suya se trate de una carrera meteórica, y opta por compararla con un "iceberg. El éxito es lo que la gente ve, debajo de la superficie hay mucho trabajo y momentos malos que quedan en un segundo plano con noticias como la del ascenso a Segunda División B", asegura.

Su vocación por formar es innata -y también académica-, es por ello que insiste en la importancia de perseverar y no decaer cuando vengan mal dadas. Una de sus educandos en el arbitraje es Xiomara Díaz, recién ascendida a Primera Femenina. "Me alegro muchísimo por ella. El año pasado fue a las pruebas del ascenso y no lo consiguió. Después del mal trago de los primeros días, levantó la cabeza y siguió. Si te lamentas no consigues nada", dice.

Marta Huerta afronta un tourmalet en el presente mes. Ayer dirigió el Italia-Japón de féminas y permanecerá 11 días más en territorio transalpino para, del 22 al 26, someterse a las pruebas en Madrid. Del 30 de julio al 3 de agosto, será el turno de la reválida UEFA en Croacia.

Xiomara Díaz: "Marta ha sido mi referente número uno"

No se rindió en ningún momento y pasó una criba -casi- imposible. Xiomara Díaz García se convierte en la primera colegiada tinerfeña en dar el salto a Liga Iberdrola. "Llevo tres años muy empeñada en ascender a Primera División Femenina. Poder trabajar de tú a tú con las que son mis referentes, es muy especial para mí", revela a El Día. Por otra parte, y tal y como acuña su nodriza Marta, establece un símil entre la figura del árbitro y la de un "iceberg. Se ve la punta que son los ascensos, designaciones, partidos y noticias, pero todo el trabajo, estudio, entrenamientos y frustraciones cuando sale mal un partido, no", apostilla la capitalina. Empero, no deja de reconocer que "vale la pena el sacrificio por días como hoy (por ayer)". En su hoja de ruta ya señala "pasar las pruebas" que acrediten su capacidad física y técnica para debutar en la élite femenina, así como "mantener la categoría". "Marta (Huerta de Aza) ha sido mi referente número uno. Cuando empecé en esto del arbitraje me hablaron de ella y me dijeron que sería internacional. Sigo sus pasos con un pique muy sano que tenemos", concluye Xiomara Díaz.

Davinia Dorta: "Esto supone un paso muy grande"

Tenerife tendrá dos colegiadas y otras tantas asistentes en Primera Femenina. A Belinda Castilla Mesa se le suma Davinia Dorta Figueroa. "Me quedé en shock cuando me llamaron para decirme que había ascendido. Hace unos años ni me planteaba poder tener el objetivo que he alcanzado. Esto supone un paso muy grande", comenta la jueza de línea. La adscrita al Colegio de Tacoronte no sabe muy bien "cuál será la siguiente meta. Lo que sí tengo claro es que voy a seguir luchando", termina diciendo.