El mejor fichaje del CD Tenerife 19/20 podría ser Aitor Sanz si la recuperación definitiva de su lesión se confirma. Ausente de los terrenos de juego desde el mes de marzo de 2018 por una lesión en el talón de Aquiles, fue intervenido quirúrgicamente el pasado 25 de febrero después de que fracasaran distintos tratamientos conservadores. "Ha sido un largo camino y muy duro, he tenido momentos muy difíciles", decía ayer el jugador en Bota Heliodoro.

El último intento se produjo en Vitoria, a las órdenes de Mikel Sánchez. "Se ha optado por un nuevo tratamiento con factores de crecimiento y una fisioterapia especial, personalizada, fuera de Tenerife, para intentar salvar el tendón", explicaba Juan José Valencia antes de iniciarse este procedimiento. Así, el madrileño se sometió a "infiltraciones periódicas", según el jefe de los servicios médicos blanquiazules, para eludir el quirófano.

En febrero, y sin la evolución deseada, se dio el paso de corregir la dolencia vía cirugía. "Ahora estoy contento y con buenas sensaciones. Cada vez hago más cosas y con mayor intensidad", explicaba Aitor que se quedará sin vacaciones este verano para acelerar su proceso de retorno a la actividad. "Estoy en la recta final de la recuperación, aún tengo un poco de debilidad, pero me veo con posibilidades de estar en el campo", señaló dando muestras positivas sobre el retorno al afirmar que está "con muchas ganas de empezar la pretemporada".

La próxima campaña será para el madrileño "como la primera", de ahí que tenga "muchísima ilusión". Su vuelta está cada vez más cerca. "Espero que llegue ya el día de la presentación del equipo", expresaba en su comparecencia de final de temporada. Lo dice pensando en "disfrutar del fútbol todo lo que pueda" porque es su "pasión", lo que le mueve "cada día para afrontar cada reto con una sonrisa". Y ese gesto positivo está a punto de volver definitivamente a su rostro. "Intentaré disfrutar de ello hasta que el cuerpo me lo permita, ahora lo valoro mucho más", comentaba uno de los capitanes del Tenerife que además afronta el nuevo proyecto "con muchas ganas".

Ahora que vislumbra el final de su calvario, Aitor agradece "a la familia, los compañeros y el club" el apoyo que le han prestado. "Solo tengo palabras de agradecimiento por el trato", completó.