Con la voz cascada tras una larga y merecida celebración, y casi recién aterrizado en Moscú, Sergio Rodríguez hace balance del título conquistado en la Euroliga y habla también de su futuro. La puerta del Real Madrid parece bastante abierta.

¿A qué sabe esta Euroliga?

Sabe muy bien. La verdad que he tenido la suerte de estar en un total de seis Final Four, jugando cuatro finales y ganando dos, por lo que el balance creo que es muy positivo, y más teniendo en cuenta la dificultad que entraña esta Euroliga, especialmente con el nuevo formato.

¿Es mejor que la de 2015?

Sabe diferente, no se puede comparar. La de 2015 fue muy especial porque veníamos de perder dos años seguidos, y encima la ganamos en Madrid. Supuso un punto de inflexión para muchos de nosotros. En esta ha ocurrido algo similar, pero en un periodo más corto porque el año pasado nos quedamos con muy malas sensaciones, y la presente temporada había sido muy complicada. Afortunadamente al final llegamos muy bien, tanto física como mentalmente.

¿Se respiraba en el CSKA una situación tensa por solo haber ganado un título en los 10 últimos años?

Hombre, cuando juegas en el CSKA siempre habrá presión. Como cuando lo haces en el Real Madrid o el Fenerbahce, que son los clubes dominadores estos años. Desde octubre debes ser muy fuerte para posicionarte bien de cara al playoff, luego ganar un cruce complicado, y jugarte todo el año en un fin de semana. Es lógico que haya presión, y más en un curso como este en el que la mayoría de la plantilla termina contrato. Quizá hubo cosas a lo largo del año que no supimos manejar bien, pero el ganar el título da una tranquilidad enorme.

Precisamente con esos condicionantes, y 14 abajo en semis, lo lógico hubiera sido desconectar...

Nunca quieres estar 13 o 14 abajo con el partido tan avanzado. Por circunstancias es algo que nos ha pasado muchas veces a lo largo de la temporada, pero en la mayoría de ellas hemos acabado ganando. Parece que no estás bien, y es verdad que no hemos hecho un juego brillante, pero a la vez pasar por algo así nos ha ayudado para manejar los momentos malos, tanto entre partidos como dentro de los mismos encuentros. Así, hemos podido tener la cabeza fría, mayor fortaleza y más confianza.

Hubo quienes dijeron que los árbitros perjudicaron al Real Madrid...

Bueno, cada uno puede verlo como quiera. La labor de los árbitros es muy difícil, y en una Final Four lo es mayor para todos. Es verdad que tenemos un equipo agresivo, con gente física y rápida, que le da constante tensión a la defensa.

¿Cómo es el vestuario del CSKA? Porque desde fuera parece un equipo con muchas individualidades e incluso con bastantes egos...

Mi relación personal con casi toda la plantilla es muy buena, e incluso diferente a la que tenía en otros equipos. Todos tenemos una edad similar, nos reunimos para que nuestros niños jueguen, y compartimos muchas cosas fuera de la cancha. Dentro de ella cada uno tiene sus particularidades antes de llegar al CSKA. El equipo se ha ido formando poco a poco para mejorar y tener mucho talento y facilidad para anotar. La Final Four fue el reflejo de todo el año, ya que dependiendo del día salía un jugador u otro.

En los últimos días se ha rumoreado mucho sobre su posible vuelta al Real Madrid. ¿Cómo logró llevarlo para que no le afectara su rendimiento en Vitoria? ¿Una vez superada esa cita, toca ya pensar más seriamente en ello?

La situación se da porque en mi contrato este año hay una cláusula de salida por las dos partes. Es normal que durante la temporada se vaya hablando, pasa siempre y en todos los clubes. Siempre hay rumores. Yo he estado muy contento en Moscú en una experiencia nueva y diferente, preparado para intentar ganar la Euroliga, que es para lo que vine. En todo momento debes tener la cabeza fría y centrada para evadirte de lo demás. El esfuerzo es grande y en mi caso también entra en juego la familia; no es lo mismo que cuando estás solo. Ellas [sobre su mujer y sus dos hijas] también dedican tiempo en su cabeza para saber dónde van a ir. Sabíamos que la situación se daría, la hemos llevado lo mejor posible, con el plus de ganar la Euroliga, y ahora es cuando habrá que plantearse todo y ver lo que queremos para afrontar los próximos años.

¿Pero qué le pide el cuerpo a Sergio Rodríguez?

Sinceramente no lo sé, porque para empezar, a día de hoy, desconozco las opciones que voy a tener. Ni he hablado con el CSKA ni con nadie. Lo mismo sucedió cuando me fui a la NBA y cuando volví de ella. Elegí la opción que me parecía más adecuada por el momento de mi carrera en el que estaba, y decidí ir a un equipo puntero en Europa; poder vivirlo desde otro punto de vista diferente al que tenemos en España. He sido un privilegiado de poder estar donde yo he elegido, me siento muy afortunado. Ya se verá lo que ocurre ahora.

El frío de Madrid es menos frío que el de Moscú...

Hombre, eso está claro... Cada cosa hay que vivirla lo mejor posible, siendo positivo, tratando de sacarle el lado bueno a las cosas y adaptándote tú y tu familia. Lo hemos llevado muy bien, hemos ganado la Euroliga que era lo más importante, y ahora tocará hacer balance y ver lo que más nos llena.

¿Se podría encontrar con gente que no le perdonara que su vuelta a Europa no fuera al Madrid? En el entorno del club y dentro de él...

Creo que ya he explicado con bastante precisión todo lo que pasó. Mi relación con el equipo, con el entorno, y con los aficionados siempre ha sido muy buena. Independientemente de que juegue allí o no, mi cariño por el Real Madrid siempre estará ahí. El club y la ciudad han sido mi casa y el vínculo será especial, principalmente porque los momentos que he vivido allí, deportivos y personales, han sido muy especiales.

Casi sin tiempo para celebraciones, el Chacho y el CSKA ponen su atención en la VTB, donde jueves y sábado tienen sendos duelos de playoff contra el Zenit. Luego tocará cargar pilas y cambiar el chip para estar en la Copa del Mundo de China... aunque Sergio no asegura su presencia. "Es otro de los aspectos que hay que analizar, porque estamos hablando de temporadas muy intensas, física y mentalmente; debes tener muy claro qué te conviene más para rendir mejor. Estar en un Mundial representando a España siempre es una prioridad; y una pasada hacerlo con ese grupo humano. Pero estamos ante momentos de reflexionar, para mí y para mi familia. Espero que en un par de semanas tenga mucho más claro qué va a pasar y quedarnos todos más tranquilos", argumenta el base, que por otro lado no da por enterrado a Pau Gasol, baja segura en la cita asiática por una lesión. "Esa pregunta me la llevan haciendo muchos años, tanto de Pau como del resto. Y siguen jugando y estando a un gran nivel. Es verdad que Pau ha tenido un gran contratiempo con su lesión, pero se cuida muchísimo, le encanta jugar, y ya veremos hasta dónde llega. Es una pena para todos por lo que da en la cancha y fuera de ella, pero no nos queda otra que adaptarse", dijo sobre el de Sant Boi.

"Ir a un Mundial es una prioridad, pero..."