Desde El Hierro a Estados Unidos a golpe de cartas, arenas y copas. Parece inverosímil, pero Cristian Sánchez, más conocido en el mundo gamer como KaNaRiOoo, después de convertirse en jugador profesional, firmará en los próximos días por uno de los mejores clubes del mundo de eSports. El joven de 20 años sobresale en el reconocido videojuego 'Clash Royale'; eso lo puso en la cartera de un equipo norteamericano que tiene a los mejores expertos en sus filas. "Tengo ganas de llegar y demostrar la valía de los de El Hierro", reconoce a El Día.

Una decisión que le cambió la vida. Corría el año 2016 cuando en los pasillos de centros educativos y entornos gamers se empezó a escuchar un nuevo videojuego entre los más jóvenes, el Clash Royale. En ese entonces, Cristian Sánchez decidió descargarse el juego de nobles que a día de hoy ocupa el top 1 en las listas. "Me entretiene como ningún otro, desde el primer momento que lo probé me encantó", comenta KaNaRiOoo.

Cristian, pese a su corta edad, es uno de los pocos elegidos que puede vivir de los eSports. Para él, para ganarse la condición pro, hay que tener "experiencia. Con el paso del tiempo, vas cogiendo habilidad que luego te sirve para dedicarte profesionalmente a ello. En mi caso, llevo desde muy pequeño jugando a todo tipo de videojuegos porque siempre ha sido lo que más me ha gustado. En el Clash Royale me resultó fácil mejorar y ser constante. El consejo que daría a cualquiera que esté empezando es que se esfuerce y persiga su sueño por muy negro que parezca, que no se rinda", aconseja Sánchez.

Su rendimiento y mejora con el paso de los años ha quedado patente en varios campeonatos que ha disputado. El pasado mes de noviembre, KaNaRiOoo logró adjudicarse la distinción como mejor jugador de la CRL1. "En dicha edición participaba toda Europa y América, por lo que podréis entender lo mucho que me ilusionó el título. Mi próximo objetivo es intentar mejorar mis anteriores resultados y no bajar el nivel", avisa.

Tal y como sucede con el resto de deportistas de élite, Cristian Sánchez tiene una agencia de representación, GLHF, que se encarga de las negociaciones, imagen, burocracia, etcétera. "He de decir que hasta que no tuve una agencia no entendía del todo la necesidad de la misma, pero ahora estoy muy contento. Ellos se encargan de todo lo que me rodea y yo lo único que tengo que hacer es centrarme en jugar, entrenar y mejorar. Te cuidan y hacen que en tu carrera como jugador profesional esté todo controlado. ¡Un saludo a todo el equipo de trabajo de GLHF!", exclama el gamer representado por Eduardo Carbonell.

Su cambio de club es inminente, tanto es así que, en las próximas horas, se desplazará a Estados Unidos con el objetivo de unir su imagen al de unos colores que destacan en la LCS norteamericana. "Estoy muy ilusionado, no tengo palabras exactas para describirlo. Ya estuve el año pasado compitiendo y me fue genial, ahora iré con uno de los mejores clubes de eSports del mundo", señala.

El herreño afronta una nueva partida con varios retos, y donde tendrá que aplicar la estrategia a su proceso adaptación en otro contexto.

Retando a estereotipos y prejuicios de la sociedad

Pese al enorme crecimiento que han experimentado los videojuegos en la última década, la sociedad sigue impregnando con estereotipos negativos a los gamers. Cristian Sánchez, pese a su condición de profesional, sigue sufriéndolo. "He leído barbaridades que se dicen sobre los jugadores de eSports en Canarias y en cualquier sitio en general. Nosotros (gamers) somos personas normales que nos relacionamos con normalidad; soy como cualquiera de mi edad. No es cierto lo de que somos introvertidos y no salimos de casa", puntualiza. Mientras, con la visión que tiene su familia sobre él, dice que ha mejorado con respecto a un inicio en el que "no les hacía mucha gracia. No obstante, ahora me apoyan cien por cien y siempre me motivan", concluye.