Estados Unidos, siguiente parada de las jóvenes figuras del baloncesto femenino de Canarias

Pese a haber concluido ya su periplo deportivo oficial –por estatutos de la Federación Española el Segle XXi no puede luchar por el ascenso a Challenge– tanto a Nicole como a Inés les quedan por delante varias semanas más de trabajo técnico y físico. Y cierta prioridad a su curso académico.

Una especie de impasse antes de afrontar, salvo sorpresa, un nuevo reto internacional con España, con la que ya fueron bronce mundialista el pasado verano con la U17. En este caso el Eurobasket U18 a celebrar en La Palma. Será el trampolín de otro gran salto: Estados Unidos y cuatro años de universidad.

Wisconsin y Tennessee

Inés jugará en Wisconsin mientras cursa un doble grado de CAFYD y Nutrición, mientras que Niki recalará en Middle Tennessee mientras se forma en la rama de la biología. «Todavía no tengo claro cuál va a ser la especialización», reconoce. Ambas tienen claro que esta salida representa la más acertada de las elecciones.

«Creo que irte a Estados Unidos es la mejor manera de poder combinar los estudios con el baloncesto como hemos hecho estos años en el Siglo», expresa García. «Es una gran oportunidad para seguir mejorando, como jugadora y como persona. Es como lo del Siglo, una oportunidad que no puedes dejar pasar», recalca Niki en ese paralelismo existente entre su club y el siguiente escalón.

Esa es la visión de la ilusión. En el otro lado del prisma, Javier Torralba. Sabedor de que el ciclo de ambas en el Segle XXI llega a su fin, y con «un duelo ya menor» que el que le «tocaba vivir en los primeros años» en su cargo, el entrenador formativo analiza con perspectiva la decisión de sus pupilas.

«El no exponerse ya al mundo profesional creo que le vendrá muy bien a Nicole. Ha parado de crecer ahora –está en 2,06 metros– y a nivel físico posee un margen de mejora increíble», expresa el preparador catalán, que ve «estos próximos años» en Estados Unidos como una etapa que le vendrá «muy bien» a la hora de «impactar aquí en el mundo profesional».

Dudas

La valoración con Inés, sin embargo, no es la misma. O al menos le genera «más dudas». «Su marcha a nivel vital es indiscutible. Pero deportivamente, si acertase con el sitio, creo que ya estaría para competir con garantías en Liga 1», afirma antes de una mayor argumentación: «Es que compites contra rivales que son diez años más que tú, algo que ha venido haciendo todo este tiempo en el Siglo.

A nivel competitivo, quedarse aquí en España o ir a una liga potente en Europa, para mí es mejor si estás preparada», expresa en un ejemplo genérico que bien se le podría asignar a García.

Acaba Torralba con ese papel de dos caras. A veces poli bueno, y en ocasiones poli malo. «Me peleo mucho con ellas porque soy tremendamente exigente; siempre estamos con esa idea de llevarlas al siguiente nivel. Y puede dar la sensación de que estoy constantemente enfadado con ellas, o que lo hacen nunca es suficiente. Pero mi labor es dejarte lo más cerca posible [del profesionalismo] o lo mejor preparada», relata Javier, que en el caso de las tinerfeñas se queda «con la sensación de que no se ha acabado el trabajo con ellas».

«Tienen mucho margen de mejora. Muchísimo. Niki acaba de parar de crecer, e Inés acaba de estabilizarse ahora. Los próximos años serán importantísimos», vaticina. Solo el tiempo dirá cuánto de importante habrá sido su paso por el Siglo.