No fallar, resistir al caos … y ganar

Un rally con aroma a supervivencia. Así fue el 41º Rally Orvecame Norte. Un recorrido por el borde del abismo, donde los favoritos cayeron como fichas de dominó bajo una lluvia implacable –como estaba previsto–. Donde los tramos se convirtieron en trampas, y solo uno de los aspirantes al podio supo mantener la calma, apretar lo justo y llegar entero a la meta. Sergio Fuentes, con Tecorice Hernández a su derecha y el Skoda Fabia RS Rally2 como herramienta, hizo de la regularidad una victoria –la primera que logra en este nivel– que lo aúpa al liderato del Campeonato de Canarias.

«No celebré la victoria cuando llegué a la meta». Esperó a que su rival «llegara y ver su crono. Todo puede pasar». Y bien se puede resumir en esa máxima el motivo de la victoria del piloto sureño: nunca dar nada por hecho, ni aunque los que le preceden en la general vayan cayendo uno tras otro.

Dijo Enrique Cruz, el gallo del corral occidental, que «probablemente ha sido el rally más complicado» que ha corrido «hasta ahora». Y eso que no es nuevo en estas guerras. Lo dijo tras rascar una sexta plaza con uñas y dientes, remontando un viernes en ruinas que lo dejaba, por culpa de un pinchazo, a más de cinco minutos de la cabeza. Sergio Fuentes también comparte esa sensación. «Puedo catalogarlo como el rally más complicado de mi trayectoria», confiesa un piloto que ha surcado el barro de República Checa, que ha transitado por tramos estrechos a los que ya se ha acostumbrado, y en el mismo corazón del Campeonato de Europa.

Pero lo de esta cita norteña fue otra película. Un thriller sin respiro, con el ritmo salvaje y el mal tiempo como verdugo, que hizo añicos las aspiraciones de Alexey Lukyanuk, Yeray Lemes y Jan Cerny. Y, en medio del caos, un Sergio Fuentes que no necesitó firmar scratchs. Le bastó con no fallar. Segundo en tres tramos, tercero en otro, cuarto en dos más –incluido el TC+– y quinto en el restante… siempre sumando. «Cuando vi que estábamos ganando tramos a todos ellos, dije: vamos a pelear», recuerda. Y peleó. Con inteligencia y estrategia.

La polémica de la casa

La imagen de Lukyanuk estrellándose contra la fachada de una casa antigua en el barrio de La Vega (Icod de los Vinos) se ha vuelto viral. El excampeón de Europa, cuando era líder del rally, fue víctima del aquaplaning. Poco después, Lemes repitió la escena y derrumbó parte de la misma vivienda. Fuentes, justo un kilómetro antes, también lo pasó mal. «El coche me hizo aquaplaning en una recta, iba en quinta y me fui contra una valla», relata. No hubo daños. Siguió adelante. «Pero mira, es un riesgo que corremos», dice. Para el candelariero, la polémica suena lejana. «Estamos corriendo. Qué más da que llueva, que haga sol… cuando corremos en tierra, o en nieve, ¿qué pasa? Hay que correr». Sin dobleces, el sureño no habla de neutralizar tramos por el mal tiempo. «Yo no veo lo peligroso que dicen ellos», sentencia.

El accidente de Lemes reaviva un viejo debate: ¿deberían evitarse tramos por núcleos urbanos en tales condiciones? Sergio no lo ve así. «He corrido campeonatos de Europa y los rallys han sido igual que este», afirma. Si la FIA aprueba el recorrido, él no ve razón para cambiarlo. Y va más allá: «Los rallys tienen que seguir así, como se han hecho hasta ahora; que la gente disfrute, que salga a la ventana de su casa y pueda ver el gran espectáculo que les ofrecemos».

Con esta victoria, el piloto sureño se posiciona colíder del Campeonato de Canarias con 61 puntos, los mismos que Enrique Cruz. Venía avisando. En Lanzarote firmó un quinto puesto. El año pasado conquistó el Villa de Granadilla. Y ahora el Norte. ¿Está en su mejor momento? «En lo deportivo, sí. A nivel de conducción, vamos a ver cómo va el Villa de Adeje». No correrá el Rally Islas Canarias. Pero la prueba sureña –la tercera de las ocho que componen el Mundialito canario– será su próxima gran cita. Otra oportunidad de sumar y de seguir en la pelea.

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