Las 'Guayotas' hacen sufrir al Terrasa

El Santa Cruz Echeyde cayó ayer en su piscina ante el poderoso CN Terrasa en un encuentro en el que las visitantes, a pesar de ser las claras favoritas, se las vieron y desearon para ganar a las mujeres de Itziar Pavón, algo que solo sucedió en el último cuarto más bien por el cansancio físico que por una superioridad extrema (9-12).

Y es que las chicharreras se permitieron el lujo de jugar de tú a tú a las egarenses en determinados tramos del encuentro, incluso remontándoles en el marcador en el tercer cuarto, en un partido en el que las visitantes nunca estuvieron cómodas, ni en ataque ni en defensa.

Y mucha culpa la tuvo Itziar por el orden y la estrategia demandada a sus jugadoras nada más comenzar el partido, sobre todo en en el ataque, abriendo a sus jugadoras y creando espacios para que Emily Nicholson jugara continuos 1x1 en el boya, desde donde metía en aprietos continuos a la portera visitante Sandra Domene.

Tal fue el destrozo que el Terrasa se tuvo que emplear a fondo y buena muestra de ello fueron las 16 exclusiones que le pitaron, la única forma de impedir que las tinerfeñas encontraran un ritmo más mortífero.

En defensa, las locales mostraron lo que es la solidaridad en las ayudas, que fue tremenda, como también la actuación de Fátima Pérez, muy bien secundada por el resto de compañeras.

Sí, perdió el Echeyde, pero aún con todo, las Guayotas tuvieron sus oportunidades y solo sus palos (hasta un total de 11) y el esfuerzo físico desplegado permitieron al Terrasa salvar los puntos.

Sin duda, las locales sin presión son otro grupo completamente distinto y ayer demostraron que podían haber incrementado su rendimiento a lo largo de la temporada. A pesar de ello, nada reprochable en un equipo que en su primer año se ha convertido en la revelación de la liga en la que en ningún momento ha coqueteado con el descenso, ya de por sí un mérito extraordinario.

Nada más comenzar el partido, a los 18 segundos Emily Nicholson conseguía su primer gol con el dibujo planeado por Itziar, pero tuvo su réplica a través de Paula Camus al instante, lo que dio alas a las rojillas para buscar la portería contaria y fruto de ello vinieron dos más por parte de Cuenda y Bosveld.

Fue un parcial de 0-3 solo cortado por Elena Alcón con un fuerte disparo (2-3, 3:48) desde el 3 que precedió a un segundo de Bosveld que sorprendió a Fátima.

Se cerraba el cuarto, pero a pesar de la diferencia, las tinerfeñas estaban en el partido e incordiando en ataque, mientras que atrás no se lo ponían nada fácil a las egarenses.

En la reanudación, Clara Ríos sumaba el primero y Camus la seguía; un toma y daca seguido por Emily en el boya (qué jugadoraza) y Pili Peña con su compañera Kindred Paul, que cerraba el marcador del cuarto en un engañoso 4-7.

Tras el descanso, festival tinerfeño. Fátima paraba un penalti y Emily llevaba al palo el balón dos veces seguidas hasta que pudo clavar una de las suyas (5-7). Las Guayotas estaban desatadas y tanto Elena como María Ramos y la propia Emily, no solo empataban, sino que remontaban el encuentro (8-7). Solo un golazo de Camus impidió ir al último acto con ventaja local (8-8). Pero para el recuerdo, un parcial de 4-1 al Terrasa.

En la reanudación, el desgaste físico y los palos de las locales, más el contacto físico de las visitantes dejaron el encuentro franco para las egarenses, mientras que las de Pavón veían cómo se les escapaban el choque.

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