El Tenerife Echeyde se come al SKP Kosice

Un Tenerife Echeyde imperial. Así de sencillo y sin ambages se puede explicar la actuación coral de los chicharreros ante el SKP Kosice, al que venció por 22-8 tras una lección de buen juego de ataque y defensa. En este caso, los de Albert Español consiguieron una renta de 14 goles que pueden ser fundamentales de cara al partido de vuelta de los cuartos de final de la LEN Challenger Cup, ya en Eslovaquia, el 8 de febrero. El pase a semifinales está en la mano de unos jugadores que lo desean por encima de todo en estos momentos.

Y esta victoria se produjo desde el corazón, en la piscina Acidalio Lorenzo ante cerca de mil aficionados que lo dieron todo para que la fiesta terminara como acabó. En el agua solo había un convencimiento, ganar y hacerlo del mayor número de goles posibles. Funcionó el ataque, la circulación de balón y la concentración para hacer realidad cada uno de los goles.

Aquí los protagonistas fueron todos, especialmente los soberbios Víctor Alegre y Albert, con 6 y 7 goles, respectivamente. Fueron los catalizadores, pero la gran actuación de sus compañeros fue tremenda por la solidaridad mostrada en todas las líneas, incluso a la hora de tirar a portería.

Detrás, los tinerfeños maniataron por completo los poderes de los jugadores de Tomas Bruder, que se vio impotente ante el alto ritmo impuesto por los locales, algo que ya había reclamado el cuerpo técnico isleño. Defender las líneas de pase y, sobre todo, imponer una telaraña de ayudas en el boya ante la potencia de Hirjak y Juhasz. Allí estaba el inconmensurable Nacho Gutiérrez, que se batió en defensa de manera extraordinaria en una de las tareas menos reconocidas del waterpolo. Detrás el de siempre, Diego Malnero, que ya dentro de los primeros cinco minutos había sumado tres paradones.

El Tenerife Echeyde va en serio y eso lo notaron los eslovacos cuando tras inaugurar el marcado Tomas Orem a los 35'', se recompuso con goles de Albert, Adrián Magriñá, Pablo Díaz y Víctor (4-1, 3:35), lo que obligó a Bruder a pedir su primer tiempo muerto para cortar tan desastroso tramo para sus intereses. Y lo consiguió, porque fueron tres minutos para llegar al término del primer cuarto con los tinerfeños fallando ocasiones claras (4-1).

En el segundo, nada más comenzar Víctor desde la zona 4 logró una diagonal al palo contrario para lograr su segundo tanto, que fue rápidamente contestado por Kamlov en una diferencia de 10''. Nada, un espejismo visitante, porque a continuación los capitalinos pisaron el acelerador y maniataron por completo el ataque eslovaco cortando su circulación de balón y sin dar posibilidades de invertirlo. Este plus significó que arriba se viera con facilidad la portería con un parcial de 7-0, elevando el resultado de 12-2 al descanso.

La fiesta ya estaba montada, el público muy metido en el partido y sus jugadores contagiados de la alegría de una Acidalio Lorenzo que no recordaba cuánto tiempo hacía que no iba tantos aficionados a sus gradas.

En la reanudación, se vivieron unos primeros minutos de igualdad. A goles de Albert y Víctor, tantos de Juhsaz; pero Pablo Díaz a falta de 1:19 rompía esa igualdad con un golazo desde el extremo bastante aplaudido (15-4, 1:19). El partido ya estaba más que sentenciado con un Kosice sin capacidad de reacción ante la superioridad tinerfeña.

El último cuarto, ya con Ahmad Pérez en la portería sustituyendo a Diego tras otra buena actuación, el Echeyde volvió a apretar el acelerador ante la insistencia de Albert Español, que quería atar la vuelta con una diferencia de goles suficiente. Y así fue, al final un claro 22-8 que deja bien claro qué equipo fue superior sobre la lámina de agua, que no fue otro que el club capitalino que ve mucho más cerca su pase a semifinales.

Cerca están, la verdad, pero el waterpolo es deporte y nunca se sabe lo que puede ocurrir en el país centroeuropeo, se matizó al término del encuentro.

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