La presencia de Carlos Alcaraz estos días en la Isla se encuentra íntimamente ligada con el deseo de Brendan Breen, director del complejo deportivo de Abama Resort Tenerife, Abama Tenis y Golf, de convertir sus instalaciones «en las mejores de la Isla» y además «posicionarlas a nivel mundial». El paso más inmediato es la recuperación para la Isla en 2023 de tres torneos del circuito profesional ATP Challenger, concretamente un ATP 100, que se celebrará entre el 16 y el 22 de enero, y dos ATP 75, que tendrán lugar a continuación, en concreto del 30 de enero al 12 de febrero. «Esperamos traer de forma continua torneos de tenis y golf al más alto nivel para Tenerife», reiteró Breen, en cuya mente también ronda, a medio plazo, hacer crecer el club que actualmente dirige y convertirlo en una academia de renombre. Tener a Carlos Alcaraz como padrino sería la combinación soñada. «Siempre queremos apostar por lo alto», añadió la misma fuente en una velada declaración de intenciones.

Impulsos como el de Abama Resort Tenerife son vistos con buenos ojos por los dirigentes isleños. Así lo reconoció ayer el presidente del Cabildo, Pedro Martín. «Queda mucho por explotar en el mundo del tenis en Tenerife, un destino que es permanente de buen tiempo. El Cabildo está comprometido en este tipo de proyectos ya que creemos que es una imagen positiva para Tenerife», señaló el dirigente insular.