David Rivas, el máximo responsable del club santacrucero, pone en valor los resultados obtenidos durante la temporada pasada de los equipos masculino y femenino. El primero consiguió ser octavo en División de Honor jugar la Copa del Rey y el segundo, el tan ansiado ascenso. Y por si fuera poco, competirá por primera vez en Eurocup.

¿Qué valoración puede hacer de los resultados obtenidos por los equipos de su club, el CN Echeyde?

No se puede decir otra cosa que magníficos. Era impensable acabar como lo hemos hecho. Una temporada para enmarcar a pesar de todas las dificultades. Todo perfecto y no hay ningún pero ya sea con el masculino con su octavo puesto o el ascenso de las chicas. Si me pregunta y escarbando, puede que algún resultado en un partido apretado que fue negativo y que nos pudo haber aupado a una posición más alta en la tabla, si hablamos de los chicos. Pero nada de esto influye en la decisión de decir que ha sido una temporada excepcional. Extraordinaria.

Son muchas las alegrías en muy poco tiempo, incluyendo al Echeyde femenino. ¿Cómo se digiere esta situación de un crecimiento tan rápido?

Son muchas alegrías en muy poco tiempo, sí, pero también le digo que han sido penurias durante muchísimos años. Pero ya nos tocaba. Al final son años sobreviviendo, llevándonos palos. Bien por las alegrías, pero en ningún momento podemos olvidarnos del camino recorrido y lo que hemos pasado. Al final la voluntad, la perseverancia y el seguir ahí tenía que estallar por algún sitio, tenía que llegar algo exitoso.

Un triunfo, viendo el devenir del club durante los últimos ejercicios.

Sí y no es muy valorado. No quiero emplear esa palabra, triunfo, porque si se dice es que parece que ya se acabó la ambición o el trabajo y no. Nosotros todavía tenemos mucho margen de mejora.

Dentro de ese crecimiento está el que por primera vez el CN Echeyde estará disputando la competición europea ¿Cómo se tomó la decisión para dar un salto de esta magnitud?

Pues la tomamos en dos días. La Federación Española de Natación (RFEN) le ofreció dar el salto al sexto y séptimo clasificados (CN Mataró y Sant Andreu), pero renunciaron y ya tuvimos que decidir deprisa y corriendo. Llevo sentado en el ordenador tres días haciendo números y sabiendo cuánto te pueden aportar determinadas subvenciones, cuantías, buscando apoyos de Cabildo y Turismo de Tenerife, Ayuntamiento de Santa Cruz... Nos tenemos que apretar aún más el cinturón, pero no podemos dejar pasar la oportunidad de jugar en Europa. Pienso que este tren hay que cogerlo porque es clave para nuestro crecimiento.

¿No es mucho volumen de trabajo para tan pocos efectivos como los que tiene el club administrativamente hablando? Se trata de un salto importante. Europa, dos equipos en División de Honor, uno en Segunda, categorías de base...

Sí (risas). Este año vamos a incorporar a la estructura a Eduardo Fernández-Caldas, que dejó de jugar la competición y nos va a poder echar una mano en muchos aspectos. Me podré liberar, entonces, de ciertas cosas; Albert (Español) también nos ayuda bastante en gestiones; Gegé Pirat, una de las jugadoras del primer equipo, también.

¿Se puede hablar de reestructuración?

No, más bien se puede decir estructuración, crecer en horizontal sin más y dividiendo los trabajos y las competencias. El que el club crezca tanto en tampoco tiempo supone que se cree una estructura potente. En España creo que somos el único club que tenemos tres equipos en categoría nacional y en Canarias somos el único en toda la historia del deporte canario que tiene dos equipos en la máxima categoría en competición nacional de cualquier disciplina deportiva con balón. No recuerdo ninguno que tuviera un masculino y un femenino en una División de Honor. Y eso hay que valorarlo en su justa medida para bien. Y ese reconocimiento me gustaría que se tuviera en cuenta y tenerlo tanto de las instituciones como de la prensa.

«Bien por las alegrías, pero en ningún momento podemos olvidarnos del camino recorrido»

¿No tiene miedo de que esto se convierta en algo que se pretenda, el reconocimiento, y que al final no se tenga ni desde instituciones ni empresas patrocinadoras?

En el tema de los apoyos de los medios, la verdad es que estoy contento esta temporada. Un periodista me dijo un día que si no ganamos, no salimos... Y bueno, al final el Echeyde ha obtenido buenos resultados y el impacto mediático ha sido mejor, aunque siempre se puede mejorar. Tenemos al CD Tenerife al lado y se lo come casi todo y nos pasa a nosotros y al resto de clubes en máxima categoría de otras disciplinas. En cuanto a las administraciones, ahora mismo está reglado y regulado y todo es a través de subvenciones y siempre es importante tener un patrocinio puntual de Turismo de Tenerife, Cabildo a través de Ideco, o el propio Ayuntamiento de Santa Cruz. No nos sentimos poco reconocidos. No voy a cometer el error que tuve hace años de compararnos con lo que le dan a otros clubes de distintas disciplinas deportivas y ahí lo dejo. Me toca defender lo que tenemos y lo que queremos es tener el mayor impacto mediático posible para ver si algún día, algún patrocinador se fija en nosotros, pero es muy difícil aquí en Tenerife. He tocado muchas puertas y siempre nos hemos encontrado que se apuesta por otras opciones.

Cuentan los más viejos que el salto a Europa puede suponer el principio del fin para cualquier club en Canarias. Hay muchos ejemplos de equipos y en varias disciplinas. ¿No teme que eso ocurra con el CN Echeyde?

No (risas). Eso fue una de las primeras cosas que me dijo alguien de una administración. Si las cosas se hacen con cabeza, se pueden llevar a cabo. El principio de nuestro club ha sido gestionar el cash que tiene para pagar y han sido muchos años de ir gestionando y reuniendo como hormiguitas, no gastarnos lo que realmente no podíamos. Si vamos a Europa, vamos a ir con el grupo y con las condiciones que tenemos. No vamos a tener un fichaje para competir allí. Vamos con lo que tenemos y con el cinturón bien apretado y sabiendo de dónde venimos y en dónde estamos. Llevo trabajando meses con una hoja de cálculo gigante, programando los pagos que entran o salen. Ahí es donde se tiene que tener una buena previsión.

Vamos, ingeniería económica.

Total, es que no puede ser de otra forma. Si no hace así no podríamos. Hay que tenerlo todo atado.

Pero ahora tiene dos equipos en División de Honor, con lo que supone más trabajo y más de esa ingeniería.

No se crea. Al final es lo mismo y lo que cambia son los jugadores. Ya teníamos el año pasado al equipo femenino en Primera y en cuanto a logística es lo mismo... Incluso más fácil porque todos los viajes son a Cataluña, mientras que el año pasado a Elche, Bilbao, Valencia... Era un infierno. Cuadrar los viajes, el transporte. Este año es todo a Barcelona, un viaje a Zaragoza y Madrid con las chicas. Con lo chicos un día a Madrid, todo Barcelona y uno complicado a Ceuta tras el ascenso del CN Caballa. En cuanto logística, da igual estar en Primera o División de Honor.

En el equipo femenino se están moviendo varios asuntos que todavía no se han concretado, mientras que en el masculino ya hay tres fichajes y se jugará con un equipo bastante joven. ¿Qué se le puede exigir a este grupo la próxima temporada en la liga?

Queríamos tener un equipo así, de estas características. Vamos a intentar estar entre los seis primeros. Lo tenemos que intentar, pero ojo, todo lo que no sea descender estará muy bien y sería un éxito, sin duda. Lo que no podemos es olvidarnos de dónde venimos o lo que somos. Somos un club, no voy a decir que pequeñito, pero que tiene sus dificultades para crecer, sin espacios, y los que hay son compartidos con tiralíneas, y vamos a competir con clubes que tienen una masa social enorme. Entonces, lo raro somos nosotros. Y ahora se ha unido el CN Caballa de Ceuta.

Albert Español, un antes y un después para el club

El presidente del CN Echeyde, David Rivas, apuntó que hay un antes y un después en el club tras la llegada de Albert Español, el actual coordinador y entrenador-jugador del equipo. Con él se ha dado un salto de calidad importante y «el mérito de todo esto se lo atribuyo totalmente, aunque él solo tampoco podría. Pero al final se ha convertido en la pieza que nos faltaba. Hay gente importante para el club, pero si faltan personas como él de carácter, talante o de su valía, no se podría caminar. Es un profesional de esto, muy inteligente, informado, hacía ingeniería mientras jugaba de alto nivel, sabe muchísimos idiomas... Creo que está aquí por su espíritu aventurero y porque tuvimos buen feeling entre los dos y hemos hecho un buen equipo de entrada. Yo en la parte que me corresponde y él en la faceta», explicó.