La UD Granadilla Tenerife prolonga su idilio con el Heliodoro Rodríguez López. El conjunto de Francis Díaz sigue contando por victorias sus comparecencias en el recinto de la calle San Sebastián, esta vez gracias a la exigua pero merecida victoria lograda contra el Sevilla (1-0), al que no le quedó otra que claudicar ante la insistencia y dominio de las blanquiazules.
Pese a hacer suya la posesión de balón y disponer de numerosas ocasiones (con sendos largueros de Sandra Hernández y Pisco), no fue hasta el minuto 78 cuando las isleñas lograron materializar su superioridad. Lo hicieron gracias a una medida asistencia de Cristina Martín-Prieto, desacertada a la hora de rematar, pero sí atinada para encontrar a Sydny Nasello entre medio de la defensa rival.
Avisó de entrada el Sevilla con un saque de esquina, pero el inicio de partido fue casi íntegramente para la UDG Tenerife. Por posesión de balón y por las incursiones que materializó por ambas bandas. Primero por la derecha con un centro de Blom que Martín Prieto remató alto, y a continuación por la izquierda, donde María José creó magia con sendas asistencias para Martín Prieto (a la que se le hizo corto el campo) y a Sandra Hernández (cabeceó al larguero).
El balón era propiedad prácticamente exclusiva del Granadilla, que volvió a acercarse a los dominios de Esther Sullastres con la chispa de Koko y la calidad de María José. Sin embargo, con el paso de los minutos el Sevilla logró al menos embarrar un tanto el duelo, a la misma que fue desperezándose poco a poco.
Despertaron las hispalenses por el flanco derecho, zona por la que Tony Payne trajo en jaque a Pisco, incapaz muchas veces de evitar los centros de la norteamericana. Pero en esos balones al área el Granadilla demostró solvencia y seguridad defensiva, tanto en los duelos directos (en especial Natalia Ramos) como en las ayudas para hacer imposible cualquier disparo a la meta de Noelia Ramos, igualmente muy certera con el balón en los pies.
Con el partido ya más abierto, la más clara hasta ese momento la tuvo en el 35 Martín Prieto, que controló un servicio en largo frontal para plantarse delante de Esther Sullastres, que, sin embargo, atinó a repelar el remate de la delantera blanquiazul. De lo que pudo ser el 1-0 el Sevilla estuvo a nada de hacer el 0-1 gracias a la enésima llegada de Payne, que buscó la llegada franca de Jessica Martínez. Sin embargo, y como en episodios anteriores, Koko estuvo tremendamente ágil para anticiparse al remate de la atacante sevillista.
Lo siguió intentando antes del descanso el Granadilla, pero Martín Prieto no terminaba de estar atinada (la portera rival le estorbó en un balón largo, y minutos después cabeceó fuera de forma débil), aunque de nuevo a la contra el Sevilla estuvo muy cerca de dar un susto. Solo una mala definición de Michele Vasconcelos tras plantarse algo escorada ante Noelia evitó que las visitantes llegaran en franquicia al intermedio.
Quizá sabedor de que a los puntos su equipo había sido superior en los 45 minutos iniciales, Francis Díaz dio entrada tras el descanso a Sydny Nasello en sustitución de Sara López en una clara declaración de intenciones de ir a por la victoria. Con el cambio de dibujo el balón fue del Granadilla frente a un rival muy replegado y que dio la sensación de querer dormir el partido.
El dominio era del cuadro isleño, pero sus ocasiones, si bien no resultaron ser menores en cantidad sí que fueron más tímidas que en la primera mitad. Ni con grandes dosis de paciencia lograron las tinerfeñas abrir la lata. De nuevo la conexión María José-Martín Prieto fue desequilibrante, aunque en esta ocasión la medida asistencia a la carrera de la tinerfeña no pudo materializarla la ariete andaluza al cruzar demasiado el balón ante la salida de Esther Sullastres.
Incluso tuvo su ocasión la UDG Tenerife en un segundo larguero, esta vez de Pisco en un lanzamiento lateral de falta, pero el balón se estrelló en el larguero. Parecía destinado el encuentro a acabar en tablas, pero la insistencia le acabó dando frutos al cuadro de Francis Díaz. Martín-Prieto, negada todo el choque a la hora de definir, sacó a relucir en el 78 su capacidad para asistir al filtrar un balón en medio de la defensa sevillista. Un pase recogido por Sydny Nasello que definió por raso, casi en semifallo, pero con la suficiente colocación y potencia para batir a Esther Sullastres en su salida para eñ 1-0.
Sin la presión de verse obligado a marcar, el Granadilla supo hacer un final de partido inteligente, evitando que el duelo se rompiera y de nuevo mostrando seguridad ante los acercamientos de su rival. El Sevilla lo intentó con más corazón que cabeza, y entre que sus ofensivas carecieron de contundencia y puntería, y que Noelia Ramos se mostró muy atenta ante cualquier balón largo, el marcador ya no se movió más. Un resultado corto, pero que hizo justicia a los méritos mostrados por la UDG Tenerife. El miércoles, en los cuartos de final de la Copa del Reina, las de Francis Díaz tratarán de evitar la revancha de las hispalenses.
