El CDB Clarinos de La Laguna presentó ayer sus nuevas incorporaciones de la primera plantilla que dirige Claudio García, la norteamericana Megan Walker y la argentina Macarena Rosset, dos jugadoras que espera, den un plus importante de cara a las aspiraciones del equipo tanto a nivel de liga nacional como la europea.
En este caso, Walker ya fue comprometida durante junio, aunque el club le ha permitido disputar la Women’s National Basketball Association (WNBA), la máxima competición norteamericana, enrolada en las filas del Phoenix Mercury que recientemente quedó subcampeona.
Jugadora nacida en el año 1998, mide 185 centímetros, aunque se desenvuelve en la posición de alero a pesar de su altura por lo que se espera que se convierta en parte de la piedra angular del equipo lagunero en la competición.
En sus inicios ya destacó desde joven, lo que le valió aterrizar en la Universidad de Conneticut como mejor jugadora High School del país y luego fue elegida en primera ronda del draft de la WNBA durante el año 2020, en el noveno puesto por New York Liberty.
El año pasado dio el salto a Europa y se enroló en el Sopron húngaro, con el que disputó la EuroLeague, en donde promedió 6,8 puntos y 2,3 rebotes en 20,9 minutos por partido; mientras que en la liga húngara sus medias fueron 12 y 4,3 rebotes por partido.
Rosset, la experiencia
Por otra parte, el Clarinos hizo oficial también ayer el fichaje de Macarena Rosset, jugadora argentina de 179 centímetros con pasaporte italiano que puede jugar indistintamente de base o escolta. Su gran experiencia internacional (ha pasado por España, Italia y Alemania, al margen de su Argentina natal) hacen de ella otra pieza importante para el equipo.
