El Balonmano Salud Tenerife cayó con honores (23-31) ante el potente Súper Amara Bera Bera, vigente campeón de la Liga Guerreras Iberdrola. Las insulares cuajaron una primera parte primorosa, marchándose al descanso con una ventaja de tres goles (15-12), pero en la segunda la mayor profundidad de banquillo de las visitantes terminó por decantar el duelo, especialmente tras un 0-7 que situó el marcador del 18-16 para las locales, hasta un 18-23 que ya no pudo contrarrestar el grupo entrenado por Óscar Pacheco.
En una primera parte para enmarcar, el Salud Tenerife puso contra las cuerdas en todo momento a un Bera Bera, al que las insulares hicieron pequeño, con una intensidad defensiva y paciencia en ataque que las hizo dominar desde los primeros ataques al cuadro vasco. Capítulo aparte merece la portera Alicia Robles, que suplió con brillantez la baja por lesión de última hora de Irene Sánchez, siendo insuperable y dejando paradas inverosímiles. Desde la portería el Salud endosó un 4-0 en los primeros cinco minutos a un Bera Bera que no encontraba la manera de perforar la defensa blanquiazul, con Alicia dando un clínic bajo palos. No fue hasta los 5:45 cuando tuvo que recoger su primer balón de las mallas (4-1).
Las visitantes fueron metiéndose en partido limando la desventaja hasta ponerse a un gol (5-4, 11’), pero el Salud Tenerife no entró en pánico y con Zaldúa pegándose como siempre en el pivote y dos goles de Elena Martínez, volvió a tener una renta cómoda (9-5, 16’)… si es que se puede hablar de comodidad en un partido contra el vigente campeón. En ese momento solicitó Imanol Álvarez tiempo muerto, para aclarar ideas, y lo cierto es que le funcionó de entrada (9-7, 18’) pero ahí Óscar Pacheco le devolvió la pausa desde el banquillo, para hacer un pequeño 2-0 con Samira y Szembery acertadas (11-7, 23’). Controlaría la recta final de la primera parte el equipo local, con la brasileña excelsa en el extremo izquierdo marcando los tres últimos goles del Salud, el último de ellos prácticamente sobre la bocina que llamaba al descanso (15-12).
Reaccionó Bera Bera desde el inicio de la segunda mitad aprovechando una temprana exclusión de Cobo para ponerse con 15-14, aunque el Salud, muy arropado por su afición, siguió por delante hasta el 18-16 (35’). A partir de ahí el referido 0-7, gracias a una mayor intensidad defensiva aprovechando errores en las entregas de las insulares, el cuadro peninsular tomaría el mando para no soltarlo más. Con solo cuatro goles en los primeros 20 minutos en la segunda parte (19-26), el Salud no arrojó la toalla sin embargo, y aunque las opciones de remontar eran nulas, pelearon hasta la última acción del partido.