El Teide B hizo valer su dominio ante un Nuryana B muy serio en tareas defensivas. Los locales certificaron su triunfo (4-2) tras una segunda parte muy abierta.

Desde muy pronto se desniveló el choque. Alexander, estilete del Teide B, aprovechó un libre directo desde la frontal para batir a Gustavo; el meta lagunero se estiró pero no llegó al esférico, que se coló pegado a la cepa del poste derecho.

Con el tempranero 1-0 se abrió un choque mucho más igualado y basado en las disputas. El Teide B, mejor posicionado sobre el campo, llevaba la voz cantante e intentaba crear desde atrás. Omar intentaba general y, sin perder instante, buscaba a Óliver. El capitán del cuadro de Barranco Grande dejó patente su verticalidad y talento como extremo derecho; el '2' driblaba y buscaba centro cuando llegaba a línea de fondo.

Las llegadas locales no terminaban de crear excesivo peligro. La zaga del Nuryana B, comandada por un jerárquico Diego, desbarató las aproximaciones. El técnico visitante, Toni, lo tenía claro: defenderse y salir al contragolpe en cuanto pudieran, y máxime teniendo en su plantel al desequilibrante Cooper. El atacante condujo en un contragolpe de 3 contra 2 y batió a un inédito Eduardo (1-1, 21').

El descanso sirvió para que el entrenador local, Antonio, charlara con sus futbolistas en busca de una reacción inmediata; sobre todo para que los suyos desplegaran el juego creativo que acostumbran.

Por su parte, el conjunto colegial adelantó las líneas y se abrió un partido con muchas más ocasiones de gol. El resultado final lo atestiguó. Primero, Aridane, que aprovechó un rechace (2-1); poco después, Cooper, después de un aviso al palo de David (2-2).

La contienda estaba rota y el Teide B lo aprovechó. Nuevamente, Alexander, muy listo en el segundo palo, hizo el 3-2 (38'). En las postrimerías, Óliver encontró el premio al trabajo realizado y cerró el marcador (4-2).