Cine

La película 'Un sol radiant' reivindica el cine colectivo con un acento canario

El filme catalán está dirigido por seis directoras y protagonizado por Laia Artigas | El proyecto gana el Premio Talents del D’A Festival de Cine de Barcelona 2023

Las directoras Belén Puime, Lucía Herrera, Clàudia García de Dios, Ariadna Fortuny, Mónica Cambra y Mònica Tort.

Las directoras Belén Puime, Lucía Herrera, Clàudia García de Dios, Ariadna Fortuny, Mónica Cambra y Mònica Tort. / E. D.

Una niña contempla el fin del mundo. Tiene 11 años y la tarde pasa. ¿Qué hacer cuando las horas, las hojas que caen, los abrazos y las palabras están contadas? La fiesta parece la única respuesta e invita a su familia a celebrar ese último encuentro que, con cámara en mano, será la película Un sol radiant. El filme catalán, un retrato íntimo y luminoso de la infancia en mitad de una paz caótica, se alzó con el Premio Talents del D'A Festival de Cine de Barcelona 2023 como resultado de un proyecto colectivo en el que está implicada la canaria Lucía Herrera junto a sus compañeras Mónica Cambra, Ariadna Fortuny, Claudia García de Dios, Belén Puime y Mònica Tort.

Bajo los laureles de indias del parque San Telmo, Lucía recuerda qué ha significado esta producción en la vida de todas, alejada durante unos días de la ciudad Condal. La historia, alejada del tormentoso ruido de la urbe y de las catástrofes apocalípticas, se resguarda en el entorno de una masía rodeada de naturaleza y plena del sol de la infancia. "¿Qué pasa cuando se acaba la vida, cómo interactúas con las personas a las que quieres, cómo reaccionamos ante esto?", fueron algunas de las preguntas de las que tiraron para escenificar esta fiesta que propone Mila cuando saben que el mundo se acaba. La madre que quiere que todos estén bien, la hermana mayor que con rabia ve cómo sus deseos son truncados, el abuelo que contempla el devenir con la experiencia de los años, y la intuición de la protagonista, "queríamos tratar el tema con la mayor luminosidad posible para apreciar la vida en sí misma".

Ante el fin del mundo

El metraje ha sido relacionado con Melancholia, de Lars Von Trevier, pero prefiere nombrar a la italiana Lazzaro feliz, a la francesa Mustang o a la catalana Sense Sostre como producciones de referencia por recrear los espacios íntimos con ese toque de magia en el que los personajes han de dejarse la piel en el encuentro. Lo que comenzó siendo el Trabajo Final de Grado del Grado de Comunicación Audiovisual de la Universidad Pompeu Fabra, donde se conocieron, se transformó, adquirió cuerpo y productora con Atiende Films y apoyo tras ganar la convocatoria de D'A Film Lab 2022, antes de este galardón que reconoce el talento emergente.

"Somos cinco compañeras, cinco creadoras y cinco cineastas; en el cine hay esta percepción de que el director es la persona que engloba todas las características creativas del proceso, dirige y tiene el germen de la idea, pero en este caso el peso ha estado compartido", explica la directora. Más allá de que organizativamente cada una necesitara desempeñar un rol, fueron combinando los cargos, por ejemplo, la propia Herrera ha sido tanto montajista como sonidista, pero todas han decidido hacia qué dirección caminar.

Lucía Herrera compartió con sus compañeras las decisiones creativas del largometraje

El reparto lo encabeza la joven actriz Laia Artigas, que dio el salto a la gran pantalla con Verano 1993 de Carla Simón, con intérpretes noveles como Nunu Sales o de una larga trayectoria como Nuria Prims, que desde que leyó el guion se plantó en la localización a pesar de no estar asegurado su sueldo. Así que el camino ha ido lográndose gracias a la cesión del material técnico por la Universidad, también la campaña de crowfunding para el teaser, cuadrar las casas disponibles para alojar al equipo en Tarragona o aliarse con los ayuntamientos de las localizaciones en las que rodaban, "que sea la gente la que nos diga que no, pero no al revés", afirma. La responsabilidad era máxima, por lo que uno de los grandes logros ha sido profesionalizarlo al completo, "hemos conseguido que cobre todo el mundo". 

Cambiar el concepto de cine de autor

La pandemia retrasó los calendarios de rodaje, por lo que tuvieron un mes para grabar y, entre toma y toma, convivir. "A veces era una locura porque estábamos reventados después de todo un día trabajando, pero luego había esta cosa de querer disfrutar del momento", como organizar juegos, gincanas, construir casi una familia en pleno verano, hasta que un año más tarde el montaje estuvo completo: "Cuando la vimos terminamos en lágrimas".

La inestabilidad emocional es dura en el proceso porque, aunque el proyecto pide energía, la sostenibilidad económica quita tiempo con el desempeño de otros trabajos. Pero llegó el momento: fueron seleccionadas por el festival y llenaron los dos pases. De repente, el reconocimiento. Inesperado. "Al estar tanto tiempo en tu proceso creativo llega un punto en el que las dudas te invaden, siempre tienes que dar un poquito más de ti, y cuando crees que no puedes más ves que ha valido la pena. Esto creo que nos ha cambiado", reflexiona acerca de ese carácter colectivo que las ha ido moldeando. 

Se reflejan en la nueva ola emergente de cine español donde hay historias con perspectivas tan diferentes, "me gusta sentirme tan inspirada por la gente que hay a mi alrededor", y espera junto a sus compañeras llegar a las salas. Queda el camino más difícil: la distribución. Moverán el largo por los festivales hasta llegar al público para que se contagien de esa genuinidad con la que Mila afronta la vida, aún llegue el fin del mundo mañana.