Entrevista

Dollar Selmouni, rapero: "Soy un Frank Sinatra de los de antes"

El músico, que pasó un tiempo en centros de menores y trabajó como chapista, firmó con Warner tras presentarse en 2016 a las batallas de Full Rap Mallorca

Dollar Selmouni.

Dollar Selmouni.

Núria Navarro

Tiene una voz honda, moteada de blues, con trazas de raï. La baza que cambió una historia que no empezó bien. Jamel (Dollar) Selmouni nació en 1996 en Soto del Real, donde su madre cumplía condena por tráfico de drogas. Su padre, dueño de un kebab en Palma, se lo llevó con él cuando tenía 3 años. Pasó un tiempo en centros de menores. Trabajó en chapa y pintura. Hasta que se presentó en las batallas de Full Rap Mallorca en 2016 y, boom, a firmar con Warner y a actuar en series de Netflix ('Hasta el cielo', 'Centauro', 'Fanático'). Junto a Kidd Keo, Israel B y Sara Socas, ha sido elegido por Budweiser para capitanear uno de los equipos de fútbol callejero de Hot Spot 2 (el partido, el 7 de junio).

Una voz singular la suya.

Sin 'autotune' ni tonterías, ¿eh? Cantar es mi forma de avanzar, de transmitir, de dar mi corazón.

¿El ascensor para salir de una vida difícil?

Siempre me lo preguntan en las entrevistas, porque se ha puesto de moda el morbo ese de "mira el chaval, qué lástima de dónde ha salido". Pero el rey de España también habrá tenido sueños que se le han ido a la mierda, ¿no?

Seguramente, pero el punto de partida era otro.

Quizá yo he tenido más dificultad, pero me quiero sacar de encima esa etiqueta. Cuando digo que he salido de un callejón muy estrecho en el que se te pueden perder cosas es que he salido de un callejón de verdad. Y me da rabia no haberme peinado antes, no haber ido más curioso, pero es que no había dinero.

Antes del despegue de Rosalía, C. Tangana dijo que ella y usted eran lo más grande.

Al Antón le tengo yo mucho aprecio. La Rosalía siguió su camino y yo me he 'quedao' en Mallorca. Pero no quiero pegar fuerte, porque una vez que pegas, ¿qué hacemos?

¿Darse algún lujazo?

No me gusta presumir. La mitad del oro que llevo es de mi padre. Con el dinerito que me ha entrado he reformado una casa para vivir encima de él y puedo pagar a los colegas los Happy Meal.

"Entre los artistas se dice que soy muy puro, muy transparente"

Llegado arriba, ¿qué ha visto?

La falsedad que hay. Todo el mundo quiere destacar, estar en el centro de la atención como sea, llegar a Hollywood.

¿Usted no?

Tratar de perseguir un sueño es normal, pero hay valores que respetar: la familia, la educación con quien sea y de donde venga. Al fin y al cabo nos vamos a morir todos igual. Ya que la gente te admira, que va con tu nombre tatuado, vamos a hacer las cosas bien, que antes las hicimos mal, que bastante rebeldes hemos sido.

Todo eso asoma en sus letras.

Se lo digo yo, reina, entre artistas dicen que soy muy puro, muy transparente. Si me tengo que caer delante de 20 personas, me caigo y digo: "Hostia, qué guarrazo me he 'pegao'". No me levanto y hago como que no me he caído.

¿Le habrán elegido por eso como capitán del Hot Spot 2?

Espero que sea por dar ejemplo. Los mayores que me rodean me dicen: "Joder, si el chaval es un 'viejoven', parece que tenga 50 años el 'desgraciao'". Si le soy sincero, lo que más me gusta es la balada y ver cómo una pareja se da amor mientras canto. Soy un Frank Sinatra de los de antes.

Solo que flamenquea.

La gente insiste "tú eres muy flamenco" y tengo que agradecer que artistas de la talla de Israel Fernández, que están en lo alto del género, me sigan, pero mi padre [nació en Argelia y a los 18 años se mudó a España] me dice: «Se nota que tienes ahí al árabe». 

"Joder, si el chaval parece que tenga 50 años el desgraciao", dicen los mayores

¿De quién recibe peticiones de colaboración?

De artistas internacionales muy grandes. Pero no puedo comentarlo, porque entro en sus discos. Si fueran singles, le prometo que se lo diría.

"Me gustaría colaborar con Luis Miguel, El Cigala, Alejandro Sanz. Gente con mucho respeto"

Hagámoslo al revés. ¿Con quién le gustaría cantar?

¡Con Luis Miguel!

¿El mexicano?

Sí. Y con Carl Davis, El Cigala, Fito Páez, Alejandro Sanz. Gente con mucho respeto. Mi sueño es rodearme de grandes artistas como ellos para llegar a los que no se tomarían el tiempo de escuchar a un chaval de la calle como yo.

Habla como si acabara de empezar.

Mi padre tiene la misión de bajarme al suelo. Vengo de cantar delante de 7.000 personas en un Riverland, la gente me respeta como si fuera el mismísimo Pablo Escobar y él suelta un "¡ehh, qué haces!", y yo agacho las orejas.

En el callejón sí es el rey.

Tengo el barrio siempre limpio. Estoy atento a todos. Y yo no bebo alcohol ni fumo. Bueno, solo la rama de la felicidad.

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