Artizar trae a la Isla a cinco de los 'Diez pintores concretos'

La Galería Artizar inauguró este fin de semana una nueva exposición que ha llamado la atención de comisarios, coleccionistas y amantes del arte de las dos orillas del Atlántico. Se trata de la muestra titulada Telos Concreto, que incluye obra de cinco de los artistas que fueron parte del movimiento de los Diez pintores concretos, en Cuba. La sala de la calle San Agustín muestra, hasta el próximo 1 de abril, piezas de Pedro de Oraá (La Habana, 1931-2020), Loló Soldevilla (Pinar del Río, 1901-La Habana, 1971), Salvador Corratge (La Habana. 1928-Miami, 2014), Sandú Darié (Roman, Rumanía, 1908-La Habana, 1991) y José Ángel Rosabal (Manzanillo, Granma, 1935).

El horario de visita se extiende de lunes a viernes de 10:30 a 13:30 horas y de 17:00 a 20:30 horas. Los sábados, la instalación permanecerá abierta entre las 11:00 y las 14:00 horas. Esta nueva apuesta artística llega cuando los gestores de la galería apenas acaban de aterrizar de su viaje a México para participar, por primera vez, en la feria de arte contemporáneo más grande de Latinoamérica, Zona Maco, con una serie de fotografías del también cubano René Peña (La Habana, 1957).

Su importancia

La importancia de esta muestra viene dada no solo por la calidad de los creadores sino por la dificultad de reunir su obra a este lado del Atlántico. "Es una exposición especial, eso es cierto", reconoció Pedro Pinto, uno de los gestores de Artizar. "Los Diez pintores concretos fue un grupo que surgió en Cuba en la época convulsa entre la dictadura de Batista y la llegada de Fidel Castro. Justo entre el 1958 y 1961. Es un movimiento que aboga por la abstracción y que tiene mucha influencia europea. Siempre nos ha interesado y, gracias a una colaboración con las colecciones de Miami, hemos podido hacerla. Todo es obra disponible y son exquisitas".

El texto de Telos Concreto ha sido elaborado por el director del Museo Nacional de Bellas Artes de La Habana, el crítico y curador Jorge Fernández. "Cada una de las obras que aparecen en esta exposición es una herramienta para conformar los símbolos de una Isla", explicó. "Es la dimensión telúrica de una cultura convertida en arte, luz y color que trascendió las contingencias históricas. A estos artistas no los detuvo las conmociones de la época batistiana, ni claudicaron ante las incomprensiones que generaron sus obras en la era post revolucionaria. Ellos nos conminan a repasar el tiempo para hacernos pensar en el arte que está por venir. Estos maestros han podido trascender, son una lección de sabiduría y espiritualidad", añadió.

La última gran exposición realizada en torno a la obra de este importante grupo de artistas cubanos tuvo lugar en 2015 en la prestigiosa galería londinense David Zwirner. En aquel momento sí que se consiguió reunir piezas de los diez creadores, en esta ocasión se cuenta solo con piezas de la mitad de ellos. "Aquí hay cinco, que son los que hemos podido recopilar. Es complejo lograrlo y lo importante es que son obras buenas, de calidad. Por eso al final hemos conseguido de estos cinco", indicó Pinto.

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