El Museo Nacional del Prado ha mostrado su pesar por el fallecimiento este miércoles de Matías Díaz Padrón, quien fue Consejero Técnico y Jefe del departamento de Conservación de Pintura Flamenca y Escuelas del Norte hasta 1700 de la institución.

"Tuvimos la suerte de poder contar con su conocimiento durante más de tres décadas en las que desarrolló una ingente actividad investigadora y docente, favoreciendo, con su riguroso trabajo y sensible dedicación, el mejor conocimiento y conservación de una de las colecciones cardinales del Prado como es la pintura flamenca moderna y, especialmente, la indeleble impronta de Pedro Pablo Rubens y su círculo", ha señalado el Prado en un comunicado.

El Cabildo de El Hierro ha comunicado este miércoles la noticia y ha recordado que en 2008 el Gobierno de Canarias le otorgó el Premio en Patrimonio Histórico e Investigación.

Matías Díaz Padrón (Valverde, El Hierro, 1935) era doctor en Historia del Arte por la Universidad Complutense de Madrid. Desde 1967 hasta 1976 es profesor en las cátedras de Historia del Arte Moderno y Contemporáneo de las Universidades Complutense y Autónoma de Madrid. En 1970 se incorpora al Museo del Prado como conservador, donde se encarga de la revisión y estudio de los depósitos de pintura, lo que tiene como resultado el hallazgo de numerosas obras inéditas.

En 1975, Matías Díaz Padrón publica el primer catálogo razonado de la colección de pintura flamenca del siglo XVII del Prado. Cinco años después obtiene la plaza de colaborador científico del Consejo Superior de Investigaciones Científicas y dos años después la de conservador de Pintura Flamenca y Holandesa del Museo del Prado. Entre 1989 y 1995 imparte cursos de doctorado en la Universidad Autónoma de Madrid.

El exconservador ha escrito más de cuarenta monografías y más de trescientos cincuenta artículos en revistas especializadas. Fue miembro de l' Académie Royale d' Archéologie et d' Historie de l' Art de Belgique y de la Real de San Miguel Arcángel de Santa Cruz de Tenerife y comendador de la orden de Leopoldo II de Bélgica, y se le concedió la medalla de oro del Gobierno de Canarias, la orden de Andrés Bello de Venezuela y la encomienda del Ministerio de Agricultura.