Iván Sáinz-Pardo, con su obra Espinas, se alzó anoche con el primer premio en la XVII edición del Festival de Cortos Villa de La Orotava, en un certamen que este año recibió más de 550 cintas aspirantes. Por su parte, los títulos Safe, de Josema Roig, y Solo, de Alberto Gross Molo, completan el palmarés con el segundo y el tercer premio, respectivamente. Los premios fueron entregados en el transcurso de la gala de clausura, que volvió a contar, al igual que el resto de jornadas, con el respaldo masivo del público, que nuevamente llegó a colgar el cartel de entradas agotadas para las jornadas de proyección de los cortometrajes que competían en la Sección Oficial.
Este año la muestra del género del cortometraje más veterana de Canarias contó como padrino con el actor barcelonés Secun de la Rosa, quien estuvo presente en la gala de anoche y entregó el premio al corto ganador. Esta nueva edición también contó con la presencia del humorista Darío López, quien fue el encargado de conducir las galas las dos noches en las que se exhibieron los cortos finalistas, así como el encuentro de anoche, cuando se dieron a conocer los ganadores.
La cinta Espinas, de Iván Sáinz-Pardo, por decisión del jurado, conquistó el primer premio del certamen, consiguiendo así además los 2.000 euros de los que consta el galardón. El segundo y tercer clasificado se llevan una cuantía de 1.000 y 500 euros, respectivamente. Por su parte, la obra Solo también se hizo con el primer premio en la Sección Canaria, con una dotación de 500 euros. El premio de público para la obra regional fue a parar a Preludio, de Roberto Chinet, con una cuantía de 400 euros. De igual manera, Espinas también se hizo con la distinción a la Mejor dirección de fotografía, patrocinado por RC Service, con una recompensa que asciende a 1.000 euros en concepto de prestación de servicios en material de cámara.
El cortometraje Espinas relata la historia de una mujer de 50 años que en medio de una crisis vital, que parece empujarla al suicidio, recibe un mensaje inesperado que cambia su vida. Su padre, con el que lleva prácticamente toda una vida sin hablarse, le pide que le visite debido a un asunto urgente. Ya sin nada que perder, la protagonista, interpretada por Aitana Sánchez-Gijón, acude al encuentro de su padre (José Sacristán) y este hecho provocará una avalancha de acontecimientos dramáticos y revelaciones que lo cambiarán absolutamente todo en la vida de la mujer.
El actor barcelonés Secun de la Rosa recordó que lleva muchos años queriendo venir al festival, «pero nunca he podido hasta ahora por motivos de trabajo» porque «le tengo especial cariño y siempre hay que colaborar con el mundo del corto». «Esta vertiente del cine ahora mismo es cuando alcanza su mejor función porque todo va muy rápido con las plataformas y la revolución digital. El corto es el universo donde los verdaderos artistas pueden expresar lo que sienten», destacó este padrino de excepción.
