La escritora aragonesa Luz Gabás es la flamante ganadora del Premio Planeta 2022 y del millón de euros con el que el famoso galardón está dotado. Lo hizo el pasado sábado con Lejos de Luisiana, un manuscrito que presentó bajo el seudónimo Hoja de Fresno y con el título provisional de Río Arriba.
La autora, que ya tiene experiencia en el mundo de las superventas literarias gracias a libros como Palmeras en la nieve y Como fuego en el hielo, es ya parte de la familia de Planeta y lleva años publicando con el sello. La que también fuera alcaldesa del municipio de Benasque por el Partido Popular (PP) logró el beneplácito del jurado gracias a una historia que califica «como un fresco de los últimos cuarenta años del siglo XVIII en el corazón de Estados Unidos». Es una novela histórica «con alma», un género que parece estar en boga en las últimas ediciones del conocido de certamen literario. Por ejemplo, el año pasado se alzó como finalista Últimos días en Berlín, de Paloma Sánchez-Garnica.
«En realidad, la novela histórica nunca ha decaído desde que surgió en el siglo XIX con Walter Scott», explicó ayer en medio de la tradicional y maratoniana mañana de entrevistas que el nuevo Premio Planeta protagoniza apenas unas horas después de darse a conocer el fallo del jurado. «La novela histórica apareció entonces como un desahogo en el contexto en el que se vivía, en esa transición de la ilustración hacia el romanticismo. Tiene un punto de evasión y por eso sigue gustando tanto: al lector le sirve para aprender algo del pasado, se evade a otros mundos y a la vez encuentra similitudes con el contexto actual».
Y Gabás ha echado el resto en lo que a documentación se refiere con su Lejos de Luisiana, donde recupera para sus lectores el papel protagonista que tuvo España en la independencia de las trece colonias norteamericanas y recrea un complicado episodio histórico con colonos, criollos franceses, españoles, tribus indias, ingleses, religiosos y esclavos africanos. En medio, además, construye una gran historia de amor. «Esta es una novela sobre la vida, el amor, las riñas familiares, los anhelos, la política, el deseo y la ambición».
Para culminar lo que ella misma define como «un novelón» fueron necesarios tres años de investigación y un arduo trabajo. Hacerlo, reconoció en la rueda de prensa que ofreció después de la gala, «casi me cuesta la salud». A los problemas familiares relacionados se unió la pandemia. «Cuando escribía esta novela estaban ahí palabras como incertidumbre, enfermedad y guerra. Con lo cual, estaba también hablando de lo que está pasando ahora, en nuestro tiempo. Veía muchas similitudes».
Gabás, que ya sabe lo que es que una de sus historias se traslade a la pantalla grande, aseguró también que el mundo del cine es determinante para ella a la hora de construir una historia. «En el siglo XVIII no visualizarían escenas cinematográficas cuando escribían sus textos pero ahora no lo puedes evitar. Somos inteligentes y sabes que si hay un primer plano sobre una taza de café, por ejemplo, es porque luego va a salir».
Sobre la posibilidad de que el Premio Planeta 2022 se convierta en el futuro en una serie o una película, la novelista fue muy clara. «Claro que se podría adaptar. Es un novelón, pero sería difícil, no sé si alguien se atrevería», dijo. «Sería como El último mohicano español pero posterior en el tiempo. Tiene ese punto del momento de relación de los españoles con los indios nativos americanos», añadió.
Lo más complicado, indicó, es compaginar ese trasfondo histórico con la parte literaria, lograr personajes con alma que no se presenten para los lectores como si fueran solo de «cartón piedra». «Creo que hay que escribir sobre lo que uno siente, no sobre lo que sabe. Da igual el contexto, da igual el género, si sientes ese pálpito en el interior puedes escribir un gran libro».
