El Festival de Cortos Villa de La Orotava celebra este año su XVII edición con un certamen que vivirá su semana grande entre el 7 al 13 de noviembre en el Auditorio Teobaldo Power y sus aledaños. La organización ya ha puesto en marcha el plazo para la presentación de cortometrajes, que se mantendrá abierto hasta el 26 de septiembre a través de la plataforma Movibeta.
Calienta motores la XVI edición del Festival de Cortos Villa de La Orotava, que se reencontrará con el público a principios de noviembre. El director de este certamen, Enrique Rodríguez, invita a todo el público tinerfeño a asistir a esta nueva cita, tanto a profesionales del sector como a público en general y adelanta que planean algunas actividades concretas para los miembros del sector audiovisual en Canarias, como talleres y conferencias. «El cine es un arte más y como todas nos toca la fibra; y ese sentimiento nos hace más humanos», reflexiona el director.
Ya está abierto el plazo de presentación de los cortos que formarán parte de la próxima edición del festival, ¿que augura el ritmo de inscripción?
El plazo lleva abierto desde comienzos de julio a través de internet. Ya se han presentado casi 300 cortos, a pesar de que agosto es un mes malo porque hay mucha gente de vacaciones, por eso esperamos que en septiembre repuntan las inscripciones. Llevándonos por lo que ha pasado otros años esperamos llegar a los 500 cortos.
El festival no cejó nunca en su empeño y ha sabido recuperarse perfectamente de la crisis sanitaria y las restricciones con una última edición de lujo.
Sí, creo que somos unos privilegiados porque no hemos cerrado nunca, llevamos 16 años seguidos haciendo este festival. Hemos salvado una crisis económica potente haciendo los reajustes necesarios y con la pandemia tuvimos la suerte de que no se cerró el Auditorio Teobaldo Power, y aunque se rebajó mucho el aforo, pudimos seguir celebrando allí el festival. Por todo eso somos unos privilegiados, por poder contar con esta cita durante 16 años seguidos.
Y durante este tiempo no solo han ofrecido cortos al público, sino también una completa programación con muchas otras actividades.
Sí, nosotros siempre buscamos una cara visible para que nos apadrine y nos ayude con la promoción del festival, un actor o director famoso en España. También nos gusta contar con actividades variadas para cubrir con creces la calidad de los cortos seleccionados. Nuestra filosofía es mantener una programación que pueda gustar a todo el mundo y por eso seleccionamos cortos cómicos, muy dramáticos, de animación, de documental, alguno experimental, y con esa filosofía le damos un aliciente al público para que venga a vernos. Nos gusta mantener un público dispar y de a pie. Valoramos al sector audiovisual que está integrado dentro del festival, pero los cortos están dirigidos al gran público en general.
En esa selección de cortos siempre ha sido importante la presencia canaria. ¿Cómo ha ido evolucionando el talento en estos 16 años?
Tras 16 años hemos visto a la industria crecer mucho. En 2021 se realizaron unas 250 producciones audiovisuales y ese dato es ilustrativo. Eso también se ha visto reflejado en el festival. La calidad de los cortos y la financiación que tienen han crecido, y las administraciones públicas están haciendo una labor importante apoyando a los cortometrajistas. La trayectoria ha sido buena y el recorrido de los últimos 16 años ha causado mejora en la industria.
A todo ello se une además que tras esta crisis sanitaria parece que la industria del cine ha salido reforzada, con multitud de propuestas se están grabando.
La gente tiene ganas de trabajar. Este es un trabajo sacrificado pero bonito. Estamos creando arte; la gente tiene ganas de olvidarse de los dos últimos años y ponerse a trabajar en sus películas.
No solo las proyecciones componen el Festival de Cortos de La Orotava, ¿qué otras actividades tienen preparadas?
Aún estamos perfilando el programa pero lo que está claro es que tan solo con las proyecciones de los cortos de las diferentes secciones ya vamos a ofrecer toda una semana de actividades al público, que por supuesto esperamos que pueda crecer aún más con otras iniciativas que nos gustaría poder poner en marcha y que anunciaremos en próximos días.
El municipio de La Orotava se ha convertido en un auténtico protagonista en este festival.
Sí, desde el principio el Ayuntamiento colaboró con nosotros, tanto económicamente como en la organización del evento y la verdad es que no pensamos movernos de La Oratava. El festival tiene su sello de identidad en esta ciudad, decoramos todo el centro comercial e histórico con el rojo de nuestro cartel y el público abarrota las proyecciones, que tienen un aforo de mil personas. Esa calidez del público hace que sigamos trabajando por ellos y por eso queremos continuar con el proyecto tal y como se inició hace 16 años.
