Cristina Mariño directora de marca de Roberto Verino e hija de este empresario natural de Ourense, falleció hoy a los 52 años de edad, tras perder la batalla contra un cáncer del que llevaba ya tiempo tratándose y que, según fuentes próximas a la familia se complicó de forma irreversible en las últimas semana.

La noticia, que creó consternación en la comarca de Verín de la que es natural la familia y en la que sigue teniendo su taller Roberto Verino, ha supuesto todo un impacto en el mundo de la moda y la sociedad en general, y se produce apenas unos meses después de que Cristina, la hija mayor del diseñador, asumiera la dirección de la marca, en la que llevaba trabajando desde su juventud como ella misma declaró: “ Yo trabajaba ya en una tienda de Verino en Madrid, mientras realizaba mis estudios”.

La triste noticia se produce el mismo año que la firma Roberto Verino, en la que el diseñador sigue trabajando como director creativo, cumple sus 40 años en el mercado y tras afianzar la expansión de su marca en todos los continentes.

Esta noticia viene a ensombrecer la estela de la marca durante un año de celebraciones para la familia, pues en junio de este mismo año, el empresario y diseñador Roberto Verino vivía otro momento significativo en su carrera con su ingreso como académico numerario de la sección de Artes da Imaxe de la Academia Galega de Belas Artes, acto que se celebró en el Auditorio del municipio ourensano de Verín.