Chanel, siempre 'ready para romper caderas' y 'romper corazones', ha regresado este domingo a España después de obtener un tercer puesto para España en Eurovisión.

A pesar de los problemas de colapso en los accesos que han sufrido los asistentes en las horas previas a la aparición de la hispanocubana, los fans, o al menos los que no han abandonado en el intento, han podido entrar a la Plaza Mayor de Madrid para recibir a la que se ha coronado como "ganadora moral" del festival de la canción.

"Ni se cotizaba que Ucrania iba a ganar, pero hemos hecho la mejor actuación de nuestra historia", comentaba uno de los seguidores de Chanel entre el público antes de que apareciese la artista.

Uno de los DJ de LOS40 Classic ha amenizado la espera con 'YMCA', de los Village People; 'Everybody', de los Backstreet Boys, o 'The Final Countdown', de Europe. Esa misma cuenta atrás que todos los seguidores de Chanel empezaban consultar en sus relojes conforme se acercaba la hora de la aparición de la cantante.

Con el público ya animado, el DJ ha cortado Marta, Sebas, Guille y los demás, de Amaral, para proyectar la actuación de Chanel en la final de Eurovisión en las pantallas gigantes que escoltaban al escenario de los conciertos de San Isidro.

Los miles de personas que se congregaban en el céntrico enclave madrileño han coreado hasta el último verso. Las gargantas se han roto al vitorear el aclamado dance break de la última versión de 'Slo Mo'.

Primero han aparecido Tony Aguilar y Julia Varela, que ayer pusieron voz a la gala eurovisiva. Y, por fin, han dado paso a la protagonista.

Chanel ha llegado ataviada con un vestido negro, a juego con el de su cuerpo de baile, un recogido en el pelo y unas gafas de sol. "Perdonad que lleve gafas, pero es que tengo conjuntivitis", ha justificado la cantante. "Son las 12 horas llorando", ha apuntado Aguilar.

"Gracias por habernos subido al barquito de 'Slo Mo'"

El público está entregado. Recibe a Chanel con un "ganadora, ganadora". "En cuanto nos bajamos del escenario, nos sentimos ganadores morales y artísticos", ha dicho la hispanocubana.

"Después de lo mal que lo hemos pasado, porque lo hemos pasado increíblemente duro, esto es lo que vale la pena", ha expresado Chanel como muestra de agradecimiento al "amor" que han recibido ella y su equipo en los días previos a la final de Eurovisión.

La representante de España se borró las redes sociales después de la final del Benidorm Fest por el acoso que sufrió al ser ella la vencedora y no Rigoberta Bandini o Tanxugueiras. "Gracias por habernos subido al barquito de 'Slo Mo'", ha dicho.

A pesar del cansancio que mostraban la artista y el cuerpo de baile, han respondido al "que cante, que cante" del público. "No oigo nada", ha indicado Chanel al equipo en el final del segundo puente de la canción. El ruido de los asistentes ha sido ensordecedor.

Como si de una victoria futbolística del pasado se tratase, han aflorado las banderas de España y han resonado los 'lo, lo, lo", alentados por Tony Aguilar.

"La audiencia millonaria ha elevado el festival a otra categoría", ha destacado Julia Varela.

Con la actuación de la hispanocubana, España ha vuelto al mapa eurovisivo. Gracias, Chanel.