La nueva edición de ARCO albergará una obra con un dibujo del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, rodeado de nombres de dirigentes "de la extrema izquierda" como Lenin, Stalin o Mao Zedong, y también cederá protagonismo a una pieza con el dictador Franco con una diana pintada en su cara.

En el caso del retrato de Sánchez es obra del artista finlandés --afincado en España desde hace años-- Riiko Sakkinen, en la galería Forsblom, que ya ha acaparado la atención en anteriores ediciones de la feria de arte. De hecho, él asegura en declaraciones a Europa Press que esta pieza supone "el final de una trilogía" que empezó con un retrato del Rey emérito en el año 2019 y otro de Franco en 2020 acompañado del título 'Franco no fue tan malo como dicen'.

Ahora, la pieza titulada 'Mis líderes favoritos de la extrema izquierda' muestra la cabeza de un Pedro Sánchez con una ligera sonrisa, con nombres a derecha e izquierda: Evo Morales, Hugo Chávez, Pol Pot o Fidel Castro, entre otros. El precio de la obra es de 16.000 euros.

"Esta obra fue creada cuando Sánchez formaba Gobierno y la derecha amenazaba con que iba a llegar un régimen comunista. Todos pensaban que este Gobierno iba a cambiar algo, pero ya ves, es una decepción porque no ha sido para mí suficientemente de izquierdas", ha señalado el artista, quien compara a la política española con "los Lacasitos". "Por fuera tiene muchos colorines pero por dentro todo es marrón", ha ironizado.

No es su única pieza con contenido político que trae a ARCO, ya que en el stand cuelgan también casi una decena de bufandas con la bandera de España --y leyendas como las de 'Caballero legionario' acompañadas de una imagen de Millán Astray-- bajo el título 'Esto es España'. El precio de la obra es de 14.000 euros y el artista ha explicado que son bufandas "que puedes encontrar en puestos a la salida del Bernabéu: esto es realismo y se muestra el mundo como es".

Una última pieza incluida en una serie de pequeños dibujos --'Todos somos Reyes en exilio'-- incluye la imagen del Rey Emérito afirmando que "ahora es un fugitivo". Además, lo acompaña de una frase del escritor Chesterton que el propio artista seleccionó "tras buscar frases en Google sobre reyes en el exilio". El dibujo cuesta 2.200 euros.

La galería José de la Mano --que el año pasado fue la estrella mediática gracias a su 'Guernica' de Ibarrola-- recupera obra de artistas vascos significativos en esta edición y, entre ellos, la de Ramón Bilbao, quien en el año 1975, coincidiendo con los últimos fusilados por el Régimen franquista, inició una serie de cuadros para mostrar esta situación política.

Uno de ellos es un dibujo de la cara de Franco con una cruz superpuesta --el precio es de 12.000 euros--. Pero también están las piezas del mismo artista de un grupo de personas tanto fusiladas como indultadas --esta pieza alcanza los 25.000 euros-- y también de ministros o personas relevantes durante la dictadura española, como Santiago Carrillo o el cardenal Tarancón --12.000 euros--.

Otra de las obras que ha llamado la atención en los días previos es la de la artista peruana Winnye Minerva, quien grabó una operación quirúrgica para una 'oclusión parcial' de su vagina y ha decidido vender este documento junto a una pintura de grandes dimensiones por un precio que estará en torno a los 15.000 euros.

"No tenía conexión con mi vagina ni identificaba mi género con ella, así que hice esta operación que ha tapado tres cuartas partes de mi órgano y únicamente está el orificio para la menstruación", ha explicado en declaraciones a Europa Press la artista limeña, quien en un principio había grabado la intervención --le costó encontrar cirujano, según ha señalado-- para "registro personal". La pieza está en el stand de Ginsberg dentro de la sección Opening by Allianz para nuevos creadores.

Las obras que 'rebajan' la polémica

En esta edición acuden también con obra dos 'enfants terribles' ya conocidos en ARCO, Santiago Sierra y Eugenio Merino. El primero repite con obra en Helga de Alvear --después de su polémica 'Presos políticos'-- y lo hace con una serie de doce fotografías tomadas de una performance en el año 2005 en un antiguo palacio de Ceacescu. Las imágenes que "muestran las filas del hambre", según los galeristas, tienen un precio de 11.000 euros cada una.

Por su parte, Eugenio Merino se apunta en la galería ADN a reflexionar sobre el fenómeno del derribo de estatuas, con una serie de postales a las que el artista ha recortado el monumento de Colón que contenían. También aporta el molde de una mano de un represaliado antifranquista que estuvo en la cárcel tres años y una placa con la leyenda 'Monumento a la explotación'.

Un Miró por dos millones

La feria también guarda sorpresas más allá del revuelo que generan algunas piezas. Por ejemplo, la galería Leandro Navarro recupera el cuadro 'Entrada de casa' que ya estuvo en el primer año de la feria, 1982, de la artista María Moreno y que adquirió el también pintor Antonio López, marido de Moreno.

Íñigo Navarro ha explicado a Europa Press que esta obra fue expuesta por su padre hace ya 40 años y que no le ha costado "convencer" a López, si bien la pintura solo está para exhibición y no a la venta. Por el momento, su galería alberga la pieza más cara de la feria, un Miró ('Vol d'oiseaux entoruant le jaune d'un éclair') con un precio de salida de 2 millones de euros, aunque también hay obra de Chagall (600.000 euros) o Tapies (un 'colchón' por 275.000 euros).