A punto de lanzar nuevo disco, que llevará por título Hypnotik, el prestigioso Dúo Cassadó estará esta tarde a partir de las 19:30 horas en la Sala de Cámara del Auditorio de Tenerife para ofrecer el concierto Luces y sombras. El programa es una «invitación a conectar con uno mismo, con nuestra propia esencia», según la pianista Marta Moll, la mitad de este tándem musical que completa el violonchelista Damián Martínez.
Llegan esta tarde a Tenerife para ofrecer en el Auditorio Luces y sombras, con piezas de Bach, Kodály, Bloch y Pärt. ¿Qué les ha inspirado para diseñar este programa?
En el programa realizaremos un viaje musical a través de las luces y las sombras de la existencia humana. Se trata de poner de manifiesto la necesidad de la espiritualidad. Cada obra tiene una especial carga emocional, es una invitación a conectar con uno mismo, con nuestra propia esencia.
¿Cómo sienta volver a los escenarios –al menos de una forma más parecida a la de la añorada normalidad– tras el covid?
Nosotros, por suerte, no hemos dejado de actuar. A lo largo de este año hemos podido recorrer España y seguir en contacto con el público. Si algo nos ha enseñado esta pandemia es que la cultura es esencial para la vida. Durante los meses de confinamiento sobrevivimos gracias a la música, al arte, al cine y a la literatura. La cultura se convirtió en una necesidad.
Violonchelo y piano encajan a la perfección. Cuando en el año 2000 decidieron comenzar esta andadura artística, ¿tenían en mente algún dúo concreto como referente? ¿En qué épocas o estilos se da más este tipo de dúo?
El cello y el piano es, a mi modo de ver, la perfecta combinación. De hecho, no es casualidad que los grandes compositores se inspirasen en esta formación. La voz del cello y el piano encajan como si de un único instrumento se tratase. Tenemos muchos referentes, grandes artistas que nos inspiran, pero lo importante como músico es encontrar tu propia voz, tu manera de expresar la música. En realidad la gran inspiración es la propia música, el repertorio que tocamos en cada concierto.
Como intérpretes, ¿sienten como un deber o una responsabilidad acercar la música de cámara al gran público?
Nuestro compromiso con la música de cámara y con la música en general es absoluto. Pienso que la música de cámara es una manera de acercarse a la música, tanto por el repertorio como por las formaciones, dúos, tríos, cuartetos. La música de cámara es un espacio donde el público y los intérpretes conectan de una manera única. De hecho, nuestra responsabilidad de acercar la música nos ha llevado a crear una serie de televisión llamada Caminos de la Música que se acaba de estrenar en Orange TV.
La formación de un músico, el estudio, no acaba nunca. ¿Es difícil compatibilizar eso con los viajes y conciertos por buena parte del mundo?
El ritmo de la vida de un músico no es el habitual. Ser músico requiere de mucha preparación y organización. No obstante, es un placer enorme poder viajar por el mundo tocando conciertos. Tenemos la suerte de dedicarnos a una profesión con un lenguaje universal que une y conecta con todo tipo de culturas. Por desgracia, a raíz de la pandemia hemos tenido que posponer varias giras por China, Japón, Sudamérica y Marruecos.
¿Cómo surgió la oportunidad de fichar con un gigante como Warner Classics?
Las discográficas son importantes para el desarrollo de la carrera de los artistas. Somos artistas Warner desde hace años, hemos publicado ya cuatro discos con ellos. Para nosotros lo más importante es el equipo humano que hay detrás. Estamos ahora inmersos en el próximo lanzamiento que publicaremos inminentemente. El próximo 3 de diciembre lanzamos nuestro primer single de Hypnotik, nuestro nuevo disco de Dúo Cassadó.
¿Les alegra visitar el Auditorio tinerfeño? ¿Cómo es su relación con el público de las Islas?
El Auditorio de Tenerife es uno de los grandes templos de la música de nuestro país. Nuestra relación con el público canario es muy especial. Yo soy canaria y para mí siempre es un placer volver a mis orígenes. Hemos actuado en todas las islas y tocar en Tenerife es un gran honor.
