El cantante de Los Coquillos, Ginés Cedrés, cuenta con un proyecto personal, Gines&Soda desde el que ha tomado la canción de ‘Paseo inmoral’ de Gustavo Cerati para formar parte del Festival Internacional ‘online’ Zoom Infinito dedicado a este músico argentino y disponible en todas las plataformas digitales. 

Hábleme del nuevo single de Gines & Soda titulado Paseo Inmoral y por qué ese título.

Es una canción de Gustavo Cerati perteneciente al disco Bocanada. Se grabó con el objetivo de participar en un festival internacional donde actuamos por segunda vez. La primera fue en 2019. Se hace por el día del nacimiento del artista. Hace tres años, cuando aún no había pandemia, colaboraron más de 40 bandas de todo el planeta tocando a la misma hora. El año pasado ya fue online por los problemas de la covid y no participamos porque no nos podíamos juntar a grabar y este año nos decidimos a interpretar una de las canciones de Gustavo porque nos lo pidió la productora. La grabamos en el local de ensayo, la produjimos nosotros y la incluimos como cuarto single de mi carrera solista Ginés & Soda.

¿Cuáles son los otros singles?

Los otros incluyen el que sacamos el Viernes Santo, Si me muero, pienso resucitar; el anterior fue Febrero; el segundo, No lo decías en serio y el primero, Nada es casualidad, que se grabó en 2015 para el documental Hasta el Amanecer. En Los Coquillos estuve 10 años, del 90 al 2000 y desde ahí hasta 2015, con los Salvapantallas, que fue cuando arranqué mi carrera solista con Ginés & Soda. Luego volví con Los Coquillos en 2015 donde ya celebramos desde el 25 aniversario hasta el 30. Siempre buscamos una excusa para seguir haciéndolo. En pandemia, con el grupo, grabamos un single nuevo, La Caja de las Flores, que está en todas las plataformas digitales y el concierto 30 aniversario, que se hizo solo online, cuando tuvimos que subir de nivel también subimos ese directo a las plataformas. Hace dos semanas hicimos el primer directo con público en el edificio Miller. Llevamos un año y medio en que solo hemos tocado dos o tres veces.

¿Cómo les ha afectado la pandemia?

De una manera tremenda, sobre todo a los técnicos que están sufriendo mucho. No me gusta quejarme porque sé que todos los sectores están afectados, aunque la cultura sea uno de los que más.

El Festival Internacional online Zoom Infinito, ¿se celebra entonces cada año?

Estos dos últimos ha sido de manera online. Se celebra cada 11 de agosto, que es la fecha en la que nació Gustavo Cerati. En esta ocasión hubo 16 bandas de más de siete países, retransmitido desde Chile. Se vendieron muchas entradas. En toda Latinoamérica se homenajea a este artista. Aunque aquí no se le conoce allí es Dios. A mí me gusta muchísimo. Incluso cuando me puse el nombre de Ginés & Soda fue conectado con su banda Soda Stereo. A quienes desconocen su música en España les encanta porque es como Calamaro, Mecano o Radio Futura.

¿Qué acogida tuvo la película documental sobre su grupo Hasta el Amanecer?

Bastante buena. Nos quedamos muy contentos con la carrera que hizo en festivales. Estuvo nominada en varios independientes y recibió diversos premios. La Televisión Canaria la emite de vez en cuando, hace poco por última vez. Tenemos en el mercado el CD y el DVD.

Ha compartido cartel en 30 años con artistas de la talla de Peter Gabriel, Maná, Willie DeVille, Café Tacuba, Los Rodríguez, Bunbury, La Cabra Mecánica, Siniestro Total o Joaquín Sabina, entre otros. ¿Cuál ha sido su favorito?

Tengo recuerdos inolvidables de compartir escenario con Miguel Ángel Lichis, de La Cabra Mecánica, que me invitó a las tablas en un campus rock de la Feria del Atlántico lleno de gente y también de un concierto en Lanzarote en que me invitaron a cantar Y bailaré sobre tu tumba unos amigos de Siniestro Total. Con Maná, en el Estadio de Gran Canaria, cuando me subí por última vez a tocar una canción a la guitarra con ellos fue también increíble, en 2011.

Se dice de usted que tiene un talento natural para comerse el escenario y conectar con el público. ¿Cómo es eso?

Llevo 30 años en esto y del roce se hace el cariño y de tanto escenario. Al principio recuerdo que cuando efectuaba los directos tenía que tomarme un whisky para quitarme los nervios y que sentía mariposas en el estómago que todavía sigo teniendo. Creo que ese es el termómetro que dice que sigo disfrutando con lo que hago. Son años de estar con públicos de distintos lugares y colores, de jugar y cantar con ellos. También de tener la suerte o la desgracia de haber formado parte de una banda tan histórica como Los Coquillos y de haber compuesto una canción que todavía sigue sonando una barbaridad, como es Borracho hasta el amanecer que hace que tenga una química especial con la gente. Todo el mundo, cuando me conoce, me ve como un familiar porque todos han tenido una borrachera hasta el amanecer, la han cantado y también conmigo. Me ven como a un primo segundo al que conocieran de toda la vida. Tengo esa confianza de decirle a la gente que levante las manos y que lo haga.