Paula Quintana ofrece una pieza alejada de lo convencional, que no tiene la necesidad de buscar el abrigo de un espacio escénico tradicional y que elude, además de una manera casi consciente, el acomodo de las tablas de un escenario al uso. ‘Esto que tú ves’ despierta una mirada poética sobre la propia vida.

Una pieza alejada de lo convencional, que no tiene la necesidad de buscar el abrigo de un espacio escénico tradicional y que elude, además de una manera casi consciente, el acomodo de las tablas de un escenario al uso. Al contrario, Esto que tú ves, que mañana, domingo, se escenifica en el exterior del Auditorio de Tenerife, a las 18:30 horas, se presenta como una propuesta resuelta a mostrarse en cualquier lugar público: una plaza, una calle, un rincón... Sin duda, una declaración de intenciones, acaso hasta una reivindicación de lo cotidiano como algo bello.

Desde este concepto, la pieza que se escenifica en el exterior «despierta una mirada poética sobre la vida», sostiene la coreógrafa y bailarina tinerfeña Paula Quintana, una actitud que depende de cada persona, sin necesidad de recurrir a mediaciones, y que muestra en su pureza «cuál es nuestra visión del mundo». La coreógrafa y cocreadora, junto a Javier Cuevas, considera que se trata de una pieza «sencilla», desprovista de artificios, en la idea de que «con lo que tenemos basta». Y en este sentido pone el acento en el acto que provoca la atención «hacia la belleza y la poesía», sensaciones que conviven con nosotros.

El público, por las exigencias que marca la pandemia, debe mantener una actitud estática. «Sería muy bonito que interactura, pero lamentablemente el coronavirus no lo permite», señala Paula. Y es que se hace preciso mantener la distancia de seguridad que establecen las normas. En cualquier caso, si más adelante las condiciones lo aconsejaran, esta obra podría reconvertirse en el paradigma de un reencuentro, una auténtica alegoría.

«No me atrevería a decir que esta pieza reivindica lo artístico como algo cotidiano», subraya esta creadora, sino más bien el hecho de lo que supone en cuanto a poner el acento y la mirada en el pulso diario. «Nuestra capacidad de mirar la vida con belleza».

Tambien representa un encuentro amoroso, una consecuencia de ese abordaje de la vida. «Formamos parte de eso. Más en estos tiempos, tan crudos, que nos cuestionan cómo estamos mirando lo que nos rodea».

La pieza está adaptada a un formato largo y otro corto, de unos 25 minutos, precisamente la versión que se va a representar mañana.

Con todo, Paula Quintana considera que un espacio abierto encierra «muchos estímulos», y aunque es difícil captar la atención, en contraposición con un escenario cerrado, «también es interesante. Tiene ese punto mágico, según el cual las cosas pueden suceder en cualquier lugar». Y Esto que tú ves se inscribe en la vida misma se convierte en natural.