El danés Tobias Lindholm, director de ‘A war (Una guerra)’ y cocreador de la serie ‘Borgen’, reconstruye la investigación del asesinato de la periodista Kim Wall a bordo de un submarino casero. Desaparecida en 2017 en extrañas circunstancias su cuerpo apareció días después y el propietario de la embarcación fue condenado un año después a cadena perpetua por asesinato. Está considerada una de las series del año 2020.

Recordarán la historia. Incluso parecía demasiado oscura para ser cierta. En agosto del año 2017, una periodista sueca, Kim Wall, desaparecía tras subir al submarino casero del inventor danés Peter Madsen, al que debía entrevistar para la revista Wired. En principio, Wall solo pasaría dos horas a bordo, pero la embarcación nunca volvió a puerto y el novio de Kim Wall decidió llamar a la policía para denunciar la desaparición.

Madsen fue rescatado poco antes de que su submarino se hundiera, un accidente que siempre resultó sospechoso. Aseguró haber dejado a Wall en un restaurante cerca de donde embarcaron, pero más adelante dijo haber lanzado su cuerpo por la borda tras una muerte accidental. Días después, un ciclista encontraba el torso mutilado de Wall en la playa de Amager, isla de Dinamarca. En el mes de abril de 2018, Madsen fue condenado a cadena perpetua por el asesinato, precedido de abusos sexuales, de la joven periodista.

Aunque dirigió dos episodios de la llorada Mindhunter, el guionista y director danés Tobias Lindholm se reconoce cansado del culto a la figura del asesino. Su intención al crear una serie sobre el caso del submarino no era dar más publicidad a Madsen, alguien en quien prefiere no pensar.

“De hecho, cuando sucedió todo aquello no quise prestar demasiada atención a la historia”, explica a través de una videoconferencia. “Hay dos reacciones básicas a la tragedia: quedar fascinado o apartar la mirada. Yo aparté la mirada. La gente me solía decir ‘aquí hay una película’, pero a mí me costaba encontrarla”, agrega.

La luz detrás de la oscuridad

Fue un tiempo después, al conocer por casualidad a Jens Møller, jefe de homicidios de Copenhague, la capital danesa, que Lindholm empezó a dar vueltas a lo que acabaría siendo The investigation, la inmensa miniserie que Movistar+ proyecta en España.

“Cuando conocí a Møller, me contó una historia absolutamente inesperada”, explica el director. “Porque no era una historia oscura. Surgía de un incidente terrible, pero era una historia sobre gente unida en una gesta; sobre jóvenes buzos que trabajaron durante días y meses en unas aguas cada vez más oscuras y frías; sobre científicos entregados; sobre los perros suecos entrenados para ayudar. Y, sobre todo, era la historia de la amistad que había entablado con los padres de Wall”, dicen.

Por supuesto, para contar esa historia, por luminosa que fuera, Lindholm necesitaba el permiso y la participación de dichos padres. La historia de Madsen es de las que levanta ampollas: Netflix tuvo que retirar de sus planes un documental sobre el asesino, Into the deep, después de que muchas voces señalaran que dos personas estaban en la película sin haber dado su consentimiento.

“Cuando hablé con Joachim e Ingrid Wall –explica Lindholm–, enseguida sentí la fuerza y la generosidad de las que me habló Møller. Ellos supieron ver que el asesino era lo que menos me interesaba”. Madsen no aparece en la serie y, de hecho, ni siquiera se menciona su nombre.

Los Wall están interpretados por un par de grandes actores como Rolf Lassgård (el protagonista de Un hombre llamado Ove) y Pernilla August (entre muchas cosas, madre de Luke Skywalker en los dos primeros episodios de Star wars), quienes también tuvieron ocasión de conocerles.

Explica August: “Conocer a los padres de Kim fue realmente emotivo; fue algo importante. Me convenció de la necesidad de contar esta historia, a lo que en un primer momento me negué en rotundo. Es muy diferente a todo lo que he hecho. Me impone la idea de interpretar a una persona que todavía está viva.

Más allá del procedimental

Igual que The wire parecía la serie destinada a acabar con los más efectistas dramas de narcotráfico, The investigation parece la serie destinada a acabar con las formas más truculentas de procedimental policial. Dice Lindholm: “Hasta ahora, mi único conocimiento de cómo trabaja la policía se basaba en C.S.I. y otras versiones similares de esa realidad. Jens Møller me mostró la verdad del trabajo policial. No consiste en buscar a un asesino o elucubrar sobre por qué hizo lo que hizo. Consiste, antes que nada, en reunir las suficientes pruebas para demostrar que alguien ha muerto por homicidio. Y eso no es tan simple”.

Para hacer de Møller, Lindholm ha contado con un viejo conocido, Søren Malling, recordado como el detective Jan Meyer de The killing (la versión original, no el remake del año 2011) y el jefe de noticias Torben Friis de Borgen, serie cocreada por el propio Tobias Lindholm. “Si me metí en este proyecto –explica el actor–, fue básicamente porque quien lo hacía era Tobias. Es una persona que sabe contar historias y sabe usarme para contar lo que le pasa por su cabeza. En mi opinión, es de los mejores guionistas de Europa”.

Otro antiguo colaborador de Lindholm, el gran Pilou Asbæk (Euron Greyjoy en la clamada serie Juego de tronos), reelabora un poco esa última frase y afirma con igual ímpetu: “Es uno de los mejores guionistas y directores daneses de su generación”.

Actor y director han crecido juntos: colaboraron, en sus respectivos comienzos, en el drama criminal R, al que siguieron Secuestro y la nominada al Oscar a la mejor película de habla no inglesa A war (Una guerra). Ahora Asbæk brilla para su amigo como un fiscal necesitado a toda costa de pruebas sólidas para presentar su caso. “En otras manos, no sé cómo habría sido este personaje, o esta misma serie”, asegura el actor. “Seguramente habrían sido peores. Todo lo que hace Tobias es realista y sobrio, nunca es algo melodramático. Él sabe que el drama está en los matices”.