El porcentaje de lectores frecuentes -aquellos que leen al menos semanalmente- creció en siete puntos porcentuales durante el confinamiento. Alcanzó este hábito, así, al 57% de la población, según el estudio El papel del libro y de la lectura durante el periodo de confinamiento por Covid-19 en España, elaborado para la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE) por la empresa Conecta Research & Consulting, con el patrocinio del Centro Español de Derechos Reprográficos (CEDRO). Este estudio completa y amplía otro elaborado en las primeras semanas del confinamiento, y que ya reflejaba un incremento de cuatro puntos en el porcentaje de lectores frecuentes en el país.

Según este trabajo, que toma como referencia el Barómetro de Hábitos de Lectura y Compra de Libros 2019, presentado en febrero de 2020, han sido las mujeres y los menores de 35 años quienes dedicaron mayor tiempo a la lectura durante el confinamiento. En el caso de las mujeres, el incremento de lectoras frecuentes alcanzó el 66% de la población femenina, lo que supone un aumento de hasta 10 puntos con respecto al periodo anterior al confinamiento. Mientras tanto, en el caso de los hombres, el incremento fue tan solo de cuatro puntos, hasta alcanzar el 48%.

Por edades, el mayor incremento se produjo entre los españoles de entre 25 y 34 años, que alcanza el 65%, 15 puntos más que antes del confinamiento. Este mismo porcentaje se registró entre el tramo de población con edades comprendidas entre los 18 y los 24 años.

Según el informe, la lectura fue una actividad que ayudó a llevar mejor el confinamiento al 82% de los lectores. El 50%, además, considera que les ayudó mucho. El 74% de los encuestados destacaron que durante el confinamiento disfrutaron mucho leyendo libros; un 70% consideró que le ayudó a desconectar; y un 65% encontró en este hábito una forma para combatir el aburrimiento. De hecho, el 99% de las personas consultadas señaló que los libros le aportaron entretenimiento; desconexión (97%), relajación (93%) y tranquilidad (90%) durante los meses de marzo, abril y mayo.

En cuanto al soporte preferido para la lectura, los españoles siguen prefiriendo el libro en papel que el libro digital, pues un 83% leyó en este formato, frente a un 38% que lo hizo a través de un soporte digital. No obstante, entre los lectores digitales se observa un incremento en el uso de los e-reader como soporte de lectura y un menor uso del ordenador.

Otro dato que arroja el informe es que la media de libros leídos fue de 3,9 durante el confinamiento, y uno de cada tres libros era en formato digital. Aunque el 70% de los lectores leyó libros que ya tenía en el hogar, la compra online ha permitió seguir adquiriendo libros. En este sentido, un 26% de los entrevistados compró libros durante el confinamiento (de ellos, el 72% lo hizo a través de internet), porcentaje que creció en 40 puntos con respecto a la situación que se vivía antes del confinamiento. Y estos compradores adquirieron una media de 2,9 libros durante el confinamiento.

Libros educativos

El papel del libro y de la lectura durante el periodo de confinamiento por Covid-19 en España indica que para más del 70% de los menores de 14 años, leer libros les ayudó a llevar mejor el confinamiento. Al 88% de los menores de 6 años se les leyó en este periodo, y un 77% de los lectores de entre 7 y 13 años consideraron la lectura como una forma para distraerse, desconectarse de las pantallas o evadirse de la situación.

El estudio también abordó la importancia que pudieron tener los libros de texto y los contenidos educativos digitales para la formación de los menores en el hogar. Así, de los datos recogidos se desprende que uno de cada dos entrevistados que utilizó el libro de texto durante estas semanas para continuar con los procesos de enseñanza valoran su utilización como muy positiva, otorgándole una nota de 8 o superior, un porcentaje muy superior al que obtienen las fichas y materiales sueltos o los contenidos adicionales de plataformas educativas y de las editoriales.

Además, el 56% de los entrevistados valoran muy positivamente la facilidad que aportan los libros de texto para seguir el temario y el 53% destaca la calidad de los contenidos. En ambos casos le otorgan una puntuación de 8 o más.