Alejandro Tosco se convirtió hace dos semanas en el nuevo presidente del Círculo de Bellas Artes de Santa Cruz de Tenerife. Para su candidatura se rodeó de los perfiles más variados que encontró entre los socios de la entidad: "Todos tienen que ver con la cultura, son profesionales y son de prestigio". El artista tinerfeño afirma que, para él, "era fundamental contar con un equipo de pesos pesados" ya que los retos que se le presentan por delante son duros. El principal, sin duda, es lograr la financiación que ponga en marcha las obras necesarias para reabrir la sede la institución, que ya lleva dos años cerrada en pleno centro chicharrero. Por ello, le ha dado una especial importancia a la parte legal, con varios abogados en su plancha, como a la referida a la arquitectura, porque "necesitamos saber lo que hay que hacer y cómo lo debemos hacer".

Estas últimas elecciones

Desde luego. En general estas elecciones han sido históricas. No solo por la participación, sino porque además hacía 30 años que no se presentaban dos candidaturas. Hasta el momento se habían pasado el testigo de unos a otros sin ningún debate porque no había habido ningún rival.

¿Y se esperaban tanta participación?

No, ninguno de los miembros de las dos candidaturas. Somos 185 socios y votaron 107, así que fue una participación bastante masiva para los poquitos que somos.

¿A qué se debe que justo en este momento se hayan presentado dos planchas después de tanto tiempo sin que ocurriera?

En primer lugar quiero decir que creo que fue una pena que, siendo tan poquitos, se presentaran dos candidaturas, porque deberíamos ir todos a una. Así que en ese sentido tengo mi mano tendida a cualquier propuesta. Yo creo que las mismas personas llevaban mucho tiempo gobernando en el Círculo, cuya sede se cerró además hace ya dos años, y todo eso creo que ha conducido al despertar de muchos de los socios.

Ahora estará todo bastante paralizado por el estado de alarma sanitaria pero, en cuanto se normalice la situación, ¿cuál será su primera acción como presidente del Círculo?

Nos vamos a concentrar en lo prioritario, que es intentar acometer las obras necesarias para poder reabrir nuestra sede. Nuestra intención es poder abrir al menos parte del edificio a través del apoyo de distintas administraciones porque sin ellas no hay manera de salvar la situación. Tenemos que buscar financiación, tanto privada como pública, para poder sobrevivir porque estamos en un momento muy crítico y delicado económicamente y tampoco ayuda tener el edificio cerrado. Tampoco podemos hacer nada más allá de concentrarnos en dialogar, solicitar, colaborar e intentar abrir la institución lo antes posible.

El pasado año, el Ateneo de La Laguna sufrió un incendio en su sede que ha obligado a cambiar un tanto su forma de proceder y realizan numerosas actividades en las sedes de otras entidades. ¿Se plantean llegar a hacer algo similar?

Por planteárnoslo, nos lo podríamos plantear, pero es que la propiedad es nuestra, excepto la cuarta planta. Se trata de un edificio en la mejor zona de Santa Cruz y eso encarece mucho su mantenimiento. Pero sí es cierto que creemos que es una idea muy interesante lo que propone el Cabildo de Tenerife, que es que le cedamos la propiedad para que ellos ejecuten las obras. Creemos que es buena idea que una entidad pública se haga con el edificio pero que nos permita seguir gestionando la cultura tal y como llevamos haciendo desde hace casi cien años. En ese sentido, sí es una propuesta similar a la del Ateneo porque cedemos la sede para que una entidad pública sea nuestro padrino y nosotros continuemos con la gestión.

¿Y hasta ahora han disfrutado de la colaboración de otras entidades o instituciones para poder continuar con su actividad?

Las ayudas han sido muy pocas. Han llegado incluso a ser nulas porque durante un tiempo fueron haciéndose cada vez más escasas. Por desgracia, nos hemos dado cuenta de que la cultura cada vez interesa menos y el apoyo a artistas e instituciones es cada vez menor también. No critico el trabajo que realizaron otros equipos de gobierno del Círculo porque creo que esto ha sido una situación general. Así que las entidades públicas y privadas deberían comprender que el apoyo a la cultura es vital y fundamental.

En su candidatura también se centraba en la necesidad de abrir el Círculo a nuevos socios.

Sí, es fundamental recuperar a los artistas y tener equipos de trabajo en los que estén representados todas las disciplinas artísticas. Queremos abrir el Círculo a críticos de arte, a las galerías, a todos, porque queremos que sea un centro de diálogo de verdad, donde se intercambien opiniones. El objetivo es volver a tener un centro cultural para que los más jóvenes aprendan de los maestros. Ahora nos encontramos con que prácticamente no hay artistas dentro del Círculo, y es una pena. Esa es otra de las cosas que tenemos que recuperar. Para mí solo hay dos cosas que hacer ahora por el Círculo y por desgracia esta, que es la que más me gusta, va a tener que esperar a que reabramos la sede.

En su candidatura afirmaba que, tras lograr la reapertura del Círculo, volvería a convocar elecciones aunque no hubieran pasado los cuatros años. ¿Lo sigue manteniendo?

Sí, porque creo que no era el momento de convocar elecciones. Al final se organizaron por una serie de circunstancias que tenían que ver con el gobierno anterior pero considero que, después de que se reinaugure el edificio, lo sano sería convocar de nuevo unas elecciones que se puedan llevar a cabo con más calma y sin tanto problemas. Los socios deben tener más tiempo para conocer las propuestas que se presenten, porque ojalá que haya varias candidaturas. Creo que sería lo más inteligente y es una manera bastante democrática de hacer las cosas.