Hace 88 años, en marzo de 1932, Hildegart Rodríguez Carballeira recorría España pronunciando la conferencia Reforma legislativa en torno al problema sexual. Muchas partes del país participaban entonces de la reforma sexual que inundaba Europa y América durante el período de guerras mundiales, y que tenía a mujeres como creadoras, pensadoras y activistas. Estas mujeres investigaban, escribían y divulgaban sobre problemas sociales que afectaban a toda la población, tales como la ignorancia sexual, la escasez de anticoncepción y la invisibilidad de relaciones que no se ajustaran a la institución del matrimonio.
En 1932, Hildegart ya era considerada una eminencia, tanto es así que Havelock Ellis, médico inglés y precursor de la sexología, la describe como "líder en la revolución sexual". No obstante, las circunstancias de su nacimiento y su muerte han eclipsado su obra. Fue concebida como un experimento eugenésico por parte de su madre, Aurora, que ansiaba una hija con altas capacidades que actuara en favor de la regeneración del mundo moderno. Para ello, escogió a un párroco como progenitor, y dio a luz el 14 de diciembre de 1914 a Hildegart. Su fallecimiento ocurriría 19 años más tarde, el 9 de junio de 1933, a causa de los disparos de su madre mientras dormía, aún cuando Hildegart estaba trabajando para lo que Aurora tanto ansiaba: la regeneración del país a través de la educación sexual.
A pesar de su corta edad, desde 1929 hasta 1933 Rodríguez Carballeira será una escritora prolífica, una divulgadora locuaz y una activista internacional. Mientras conseguía la licenciatura de Derecho y entraba en la escuela de Medicina, escribió más de una docena de libros, entre los que destaca El problema sexual tratado por una mujer española (1931), donde defiende el amor libre y la sexualidad en favor de la libertad de las mujeres. A la vez expone la necesidad de ejercer maternidades y paternidades conscientes y responsables, en línea con los ideales eugenésicos prevalentes en la época, pero aplicados a la mejora de la calidad de vida de las clases trabajadoras.
Su pensamiento también se difundirá en charlas, como las que impartió en marzo de 1932, a través de toda la geografía española, donde disertará sobre educación sexual, socialismo, profilaxis anticonceptiva o enfermedades venéreas, así como en cientos de artículos en diarios y periódicos. En la revista Crónica, el 21 de junio de 1931 expone su concepción transformativa y activista del feminismo que implica tomar conciencia de las desigualdades y retos a los que se enfrenta la sociedad: "El sentido depurador del feminismo sitúa a la mujer ante un horizonte de derechos, pero ante la realidad de unos deberes".
Su pensamiento también estará vertebrado por las corrientes internacionales. Hildegart será la secretaria de La Liga para la Reforma Sexual en España, que defiende en su primer artículo la igualdad política, económica y sexual para hombres y mujeres. Además, mantendrá correspondencia con personalidades eminentes en el campo de la sexualidad como la educadora americana por la anticoncepción Margaret Sanger, el activista alemán en favor de los derechos de los homosexuales Magnus Hirschfield y el ya mencionado Havelock Ellis.
La agenda política que se refleja en la obra de Hildegart está contextualizada en los movimientos feministas de las décadas de 1920 y 1930 en España, que eclosionan en la Segunda República, y que en materia sexual y anticonceptiva también se evidencian en la obra de Amparo Poch. La figura de Hildegart Rodríguez Carballeira es necesaria para rescatar este periodo y reconstruir la memoria que comporta nuestra realidad y los derechos sexuales y reproductivos que tanto entonces como ahora se cuestionan.
