El joven violinista Daniel Lozakovich ha dejado a la crítica y al público encantados y sorprendidos. "Perfecta maestría. Un talento excepcional", observó Le Figaro después de una actuación en el Festival de Verbier, mientras el Boston Globe elogiaba "la poesía, pureza tonal y sobrada técnica" con ocasión de su debut con la Orquesta Sinfónica de Boston y Andris Nelsons en el Festival Tanglewood en julio de 2017.

Nacido en Estocolmo en 2001 comenzó los estudios de violín a los 6 años. Hizo su debut en solitario en 2009 con la Orquesta de Cámara Virtuosos de Moscú y Vladimir Spivakov en la capital rusa. De él se dice que desprende una "madurez inusual", muchos lo consideran el nuevo Menuhin, no en vano, junto a su Stradivarius de 1713, ya ha actuado junto a las más destacadas orquestas y los mejores directores. "Lozakovich es un artista serio y exige ser tomado en serio", escribía el Hamburger Abendblatt en agosto de 2019.

"Daniel Lozakovich, retrato de lujo de un joven virtuoso", consideraba Jean Lacroix en la Revista Crescendo.

"La actuación de Daniel Lozakovich llenó el Disney Hall con su habilidad para producir un tono voluminoso, armónicos frágiles como el aire y un virtuosismo relámpago", subrayaba Jim Farber, Voz Clásica de San Francisco.

Ahora se presenta en el Festival de Música de Canarias .